Urones de Castroponce (Valladolid) celebra a finales de agosto la XVII edición del Festival de Teatro Alternativo
CAMPO REGIONAL / Teresa Sanz Nieto
Angelines abre todo el año las puertas de su bar, en Urones de Castroponce. Suman menos de cien vecinos en los meses fríos, muchos días en los que la cita con el café es un motivo para hablar con otros. Lleva veintitantos años atendiendo la barra, así que conoce muy bien a sus fieles clientes. Como en otros pueblos de la Tierra de Campos, año a año el número de vecinos se ha recortado. Pero hay una semana, concretamente la última de agosto, en la que Angelines sabe que hay que preparar bocadillos de tortilla, jamón y lomo para gente que llega a Urones para ver teatro y que, antes o después de ver la obra, querrá comer algo.
Porque el Festival de Teatro Alternativo es lo que, desde 1997, diferencia y pone en el mapa al pueblo. El nombre de Urones de Castroponce aparece en los periódicos, se habla sobre él en las radios, y sus calles salen por la televisión. Bastante culpa de ello tiene Raúl Gómez, fundador del festival, alcalde del municipio por entonces y, sobre todo, hombre de teatro, con su propia compañía, Fabularia. Raúl ni quiere ni se ha despegado nunca del medio rural. Nació en Castroverde de Campos, y con 11 años se mudó a Urones. “Vivo en el medio rural, lo he mamado y lo conozco desde pequeño, así que tenía claro que lo que yo pudiera aportar surgiría en él. Ese compromiso con los pueblos lo sentimos muchos más de lo que a veces se cree. En los mismos ayuntamientos hay muchísimos concejales sin remuneración, que están ahí porque quieren aportar algo a su comunidad y a su pueblo”, comenta.
Recuerda la sorpresa que causó la primera representación que llevó a Urones, “sin ser fiestas, ni semana cultural, sólo porque sí”. Se representó un clásico griego, al aire libre, en una cantera a 2 kilómetros del pueblo. “Daba igual que fuera de Aristófanes, la gente disfrutó como si fuera un texto de ahora mismo”, explica. Así, año a año, y ya suman 16, los vecinos de Urones han construido su propio criterio teatral. Hay obras que les gustan más y otras menos, “pero no hay ningún miedo a programar cualquier obra contemporánea, porque están acostumbrados a ver cosas muy distintas. Para un montaje, superar el medio rural es una prueba de fuego, porque no es un público complaciente, sino exigente: no le basta con que seas un virtuoso, además tienes que conectar”, dice.
En el Festival de Teatro Alternativo el público es, pues, diferente. Pero también lo son los espacios en los que se ofrecen las obras. Puede ser la antigua cantera, la iglesia, el polideportivo, un pajar, una nave, un tramo de una calle… A raíz del festival, promovieron la creación de un espacio estable, cubierto y acondicionado, un verdadero teatro con capacidad para doscientas espectadores –prácticamente el doble que los vecinos que existen–, que desde 2001 es una realidad. Acoge los montajes que requieren más infraestructura, pero también permite que recalen en el pequeño pueblo terracampino otros espectáculos a lo largo de todo el año. Incluso, apartando las butacas, acoge y caldea las fiestas locales, que son en pleno mes de enero. Este espacio recoleto lo bautizaron con el nombre de “Teatro corral de Anuncia”. Teatro corral por recordar el origen del género, en los antiguos corrales de comedias; de Anuncia, porque allí estaba la casa de la señora Anuncia, una vecina de Urones conocida por su amabilidad, que, ya mayor, viviendo en una residencia, vendió la casa al ayuntamiento para que sobre ella se construyera un teatro único en un pequeño municipio de la Tierra de Campos. Un teatro que Anuncia no llegó a conocer pero que hoy da vida a Urones. Y no sólo porque durante algunos días se anime el bar de la localidad, o incluso algún establecimiento de turismo rural de la zona. Como dice Raúl, “hay otra cuestión muy importante, más en estos momentos en los pueblos, que es la autoestima. Pero, ¿cómo la valoras económicamente? Mucha gente dice que en los pueblos no hay nada, que se va a Benavente, a Medina de Rioseco, a Valderas, al mismo Valladolid. Por eso es importante probar que en los pueblos sí que hay cosas, si se cree y se pelea por ellas”.
Una programación de gran nivel
Del 24 al 31 de agosto se celebra la XVII edición del Festival de Teatro Alternativo de Urones de Castroponce, que cuenta este año con nuevo director, Alex Rodríguez, que toma el relevo con el apoyo del hasta ahora responsable, Raúl Gómez. Aunque todavía no está el programa cerrado, ya se sabe que participarán compañías como Cía.Ganso (Euskadi), con el espectáculo “Medio Pelo”, Ghetto 13-26 (Castilla y León), con “Se prohíbe mirar al césped”, y Teatro Paraíso (Euskadi), con “Pulgarcito”. Para Tomás Fernández, director artístico de esta última compañía, que repite por tercera vez en su cita con Urones, “este festival, con sus pocos recursos, logra una programación de gran nivel y saca los colores a otros teatros públicos con mucho más presupuesto. Si nos llaman de Urones cambiamos las vacaciones, estamos muy orgullosos de colaborar. Para nosotros es inolvidable la primera vez que fuimos, y vimos que la gente iba con su silla a ver teatro. Nos sentimos como verdaderos cómicos de la legua”, concluye.
