Las altas temperaturas de verano y la sequía de este año están dejando muchos menos kilos en las bodegas en una vendimia muy adelantada. Las heladas de primavera dañaron de forma considerable especialmente algunas zonas en la Ribera de Duero y Rueda que tendrán reducciones importantes. El dato positivo es la calidad, muy buena por lo general en todas las denominaciones. ASAJA Valladolid insiste en que los precios de la uva deben ir al alza.
En la Denominación de Origen Cigales ya se ha vendimiado, prácticamente el 90% de la superficie, con una uva muy sana aunque algo más pequeña de lo habitual, debido en gran parte a la sequía de este verano. En cuanto a la producción, las primeras previsiones indican que será un 40% menor según el consejo regulador debido a las heladas primaverales y a la escasez de agua. Estas circunstancias han provocado que la uva sea más pequeña y el rendimiento en mosto sea menor. “Vamos a tener entorno a un 60-70% menos de producción. Si el año pasado lo normal fueron rendimientos sobre los 7.000 kilos por hectárea, esta campaña debido a la sequía, las heladas y algo de pedrisco, no sobrepasaremos los 2.500-3000 kilos/hectárea”, comenta Alfredo Valdés, viticultor en Cigales.
Al igual que en el resto denominaciones, esta menor producción va traer mejores precios. “La tendencia es una subida del precio de la uva pero no sabemos todavía que porcentaje será porque muchas bodegas todavía no lo han fijado. Pasaremos de los 18-22 céntimos por kilo de media el año pasado, con lo que no se cubren los costes de producción a superar seguramente esta campaña los 36 céntimos”, explica Valdés. A pesar de estos buenos precios, muchos agricultores de esta denominación creen que tendrán menos rentabilidad este año con estos precios buenos precios y menor producción que el año pasado con precios más bajos pero una producción mayor.
El precio bajo de la uva en la Denominación de Origen Cigales sigue siendo uno de los mayores problemas para la continuidad de viticultores en esta zona. “Necesitamos más campañas de marketing para que se conozcan la calidad de nuestros vinos, los vinos que producimos aquí están a la altura de otras denominaciones y la gente tiene que conocerlos”.
D.O Rueda
A 27 de septiembre, se habían recogido en Rueda unos se han recogido 83.420.637 kg de uva, de los que 82.507.397 kg corresponden a variedades blancas. A finales de septiembre o principios de octubre, se habrá recogido la totalidad de la uva de las más de 14.000 hectáreas con las que cuenta Rueda. “Estaremos sobre los 90-95 millones de kilos de uva frente a los 110 millones de kilos de uva que recogimos en 2016 que fue un año de buena producción.”, explica Jesús Díez de Íscar, director técnico del Consejo Regulador de la D.O. Rueda.
Francisco Lozano, viticultor en La Seca (Valladolid), cree que incluso la reducción será todavía mayor debido al efecto de la sequía y las heladas. “Estimo que la cosecha será un 30% menor que el año pasado y que se quedará sobre los 85-87 millones de kilos de uva. De obtener de media 9.500 kilos hemos pasado a unos 7.500 kilos por hectárea. Incluso los viñedos más regados creo que van a tener difícil conseguir los 8.500 kilos por hectárea”.
La reducción de cosecha también ha estimulado al alza los precios de una denominación que vive un momento dulce. “El precio de la uva ha subido unos 10 céntimos por kilo de media. Hemos pasado de los 80-85 céntimos del año pasado a los 90-95 de este que ya es bastante, ya que este sobreprecio hay que defenderlo después en el mercado”. Aunque en esta zona se habla que se va llegar en varios casos a pagar 1,10 euros, también es verdad, que hay contratos que se realizaron en su día a 0,60 euros por kilo.
D.O. Ribera del Duero
La Ribera del Duero se vio afectada por una helada muy fuerte en la noche del 27 al 28 de abril que destruyó muchos brotes del año lo que provocará una reducción de la cosecha. El ciclo ha venido adelantado y aunque ha habido sequía, está ha afectado de manera subyacente y sin síntomas excesivos. “Las viñas han tenido poca agua pero suficiente. Las últimas lluvias caídas han venido muy bien para igualar y rematar la maduración lo que ha hecho que hayan ganado peso”, comenta Agustín Alonso, director técnico de la Denominación de Origen Ribera del Duero.
La vendimia en la Ribera del Duero se generalizó a partir del 22 de septiembre con unos 10- 12 días de adelanto sobre lo que es habitual. “La sanidad es perfecta y los datos de los muestreos me recuerdan a la de 2005, que fue una cosecha espectacular. De ahí que tengamos la esperanza de que la calidad sea muy buena”.
Para Gaspar Benito, responsable de viticultura en Bodegas Briego, la reducción de la cosecha en la Ribera del Duero va ser importante, un 40% menos que el año pasado. “La recuperación de las heladas ha sido escasa, a nosotros nos afectó a más del 50% de la explotación y apenas hemos recuperado un 10%”.
Según Benito los rendimientos medios oscilaran entre “los 1.500 y 2.000 kilos por hectárea en las viñas afectadas y los 2.500 – 3.500 kilos por hectárea en las que están mejor. Unos 2.500 kilos menos de media que un año normal”, avanza Benito. Si el rendimiento es la cruz este año, la calidad es la cara amble ya que “el estado del viñedo es muy bueno y la calidad está ahí”.
Después de unos días del inicio de la vendimia, los precios también cotizan al alza en la ribera donde ya se habla de entre 1,40 y 1,50 euros por kilo, cuando el año pasado se pagó de media 1,05.