La burocracia y el ecologismo mal entendido han expulsado de nuestros montes a la ganadería extensiva baluarte de la limpieza de nuestro patrimonio natural
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) y las “políticas de despacho de Bruselas” son corresponsables del aumento de los incendios en España.
La incidencia del cambio climático y una mala gestión en prevención por parte de las comunidades autónomas durante todo el año, son claves para entender la situación que esta atravesando nuestro país. Aunque hay otros factores decisivos que han contribuido a llegar a esta situación.
Las políticas medio ambientalistas de Bruselas alejadas una vez más de la realidad de los pueblos y el Ministerio para la Transición Ecológica más radical y menos dialogante de toda Europa, son también muy responsables de lo que está sucediendo.
El MITECO con sus políticas extremistas y su excesiva burocracia ha expulsado la ganadería extensiva del medio rural. “Para permitir pastorear y mover al ganado, uno de los mayores activos para la limpieza de los montes, es tal la burocracia que se exige, que los ganaderos optan por no sacar los animales al campo”, denuncia ASAJA Valladolid. Hoy en día, es imposible hasta hacer unos simples bebederos en el campo porque hay que pedir tantos permisos que pueden pasar años sin que nadie lo resuelva. “Si de verdad queremos fomentar la ganadería extensiva y su labor de fijar población y preservación de nuestros bosques y montes debemos facilitarla y no ponerla trabas”, recomienda ASAJA Valladolid.
Para ASAJA Valladolid, el monte y los bosques están sucios y con “combustible para arder” porque es imposible limpiarlo o tocar algo sin miedo a una sanción administrativa del SEPRONA, “Cualquier alteración, recoger algo sin permiso es motivo de multa y nadie quiere arriesgarse. La limpieza de arroyos ha desparecido y se han eliminado las quemas de rastrojos responsables y controladas que hacían una labor fundamental por un extremismo conservacionista mal entendido alejado de la realidad de los que viven en el medio rural.
Este “mantra radical” impulsado por Bruselas y respaldado por un ministerio de transición ecológica todavía más extremista, junto al seguidismo de estas políticas por parte de las comunidades autónomas está matando nuestros pueblos. “Hay que cambiar estas políticas, pero tampoco pueden servir de “cortina de humo” de para tapar la lamentable gestión en prevención realizada por las comunidades autónomas”. Para esta organización, el campo está abandonado, sin medios, con cortafuegos que no se mantienen desde hace años. “Esta situación es responsabilidad de unas comunidades autónomas que no han realizado bien su labor y ahora quieren buscar excusas y culpables cuando ellos son corresponsables de esta situación”, denuncia ASAJA Valladolid.
Para esta organización agraria las soluciones pasan por eliminar la burocracia, fomentar la ganadería extensiva, activar un plan nacional de prevención de incendios nacional y promover la participación de los habitantes del medio rural y organizaciones agrarias en estos planes de trabajo para que aporten su opinión o crear un mando nacional de coordinación para la prevención y extinción de incendios que agilice la intervención y la toma de decisiones porque los incendios no entienden de territorios.