El campo de Castilla y León recibirá un duro varapalo económico si el presupuesto de la Unión Europea sale adelante con la propuesta que esta semana ha presentado la Comisión. El recorte del 9% en términos constantes se traduce en una pérdida de ayudas al sector agroalimentario y forestal de Castilla y León de 693 millones de euros en el periodo de siete años, si tenemos en cuenta los importes medios que se han percibido en la etapa anterior y que son públicos.
Además, no hay que olvidar los fondos europeos del FEADER que no se han trasferido a los agricultores y empresas, sino que los ha ejecutado directamente la Junta o el Estado en obra pública de modernización de regadíos o nuevos regadíos, en importes que no son fáciles de cuantificar por ASAJA, y que sufrirían también el correspondiente recorte.
Del recorte de 693 millones en ayudas, los más afectados son los agricultores y ganaderos como perceptores del paquete más numeroso, las ayudas directas de la PAC, pero también se vería afectado el sector forestal, la industria agroalimentaria y los grupos de acción local que reciben fondos del FEADER, sin olvidar las ayudas específicas al sector del vino.
ASAJA de Castilla y León considera que la única justificación para reducir las ayudas de la PAC sería que los productores recuperasen renta con unos precios más remuneradores, pero la tendencia general siempre ha sido la contraria, e incluso se ha agravado más con la crisis económica que ha estallado con la pandemia.
El campo de Castilla y León ha comenzado a ver en sus propias carnes una caída de precios, de alcance y duración imprevisible, que hundirá la renta agraria de manera brutal, lo que únicamente se puede compensar con apoyos públicos desde la PAC. ASAJA no entiende que cuando todos los sectores económicos están pidiendo el rescate del Gobierno, y a su vez el Gobierno pide el rescate a la Unión Europea, al campo español y por extensión al de Castilla y León se le deje abandonado a su suerte.
ASAJA hace un llamamiento al Gobierno para que de verdad defienda a la agricultura y ganadería como sector estratégico que es y que cumpla su promesa de no aprobar un presupuesto comunitario que no garantice al menos el nivel de apoyo del marco financiero anterior.
El presidente de ASAJA Castilla y León, Donaciano Dujo, apunta que “en plena crisis por el coronavirus, parece que Bruselas quiere aprovechar la situación para descolocar al campo con órdenes contradictorias e inasumibles. Por un lado, anuncia recortes en las ayudas agrarias, y por otro quiere imponer fuertes impedimentos que obligarían a reducir la capacidad productiva del sector. Parece que en Bruselas nadie se acuerda ya de que somos un sector esencial para la sociedad, como bien ha quedado probado a lo largo de esta pandemia”.