El Consejo Regulador de la Ribera del Duero ha reunido un año más a un grupo de expertos profesionales de primera línea en un Comité Excepcional que se ha encargado de calificar la añada 2018 de la Denominación de Origen, con el objetivo de determinar la calidad de los vinos elaborados con la uva de la última cosecha.
Según puede leerse en El Norte de Castilla, el 11 de marzo los sumilleres han llevado a cabo una cata de diez vinos representativos de la Ribera del Duero, que han sido previamente seleccionados durante los pasados meses por el Departamento Técnico, tras sucesivas catas de más de 300 referencias. El Comité Excepcional ha realizado un análisis de esos vinos, empleando sus conocimientos y experiencia para ver las cualidades de cada uno de ellos en el momento actual y su potencialidad futura, cuando lleguen al consumidor.
La puntuación otorgada por cada sumiller se ha introducido en un sobre cerrado y firmado, el cual ha sido abierto por el Pleno en la reunión ordinaria de Consejo que ha tenido lugar esta misma mañana. La decisión ha sido unánime, calificando la cosecha de 2018 como «muy buena».
Este año, el Consejo Regulador ha contado conun Comité Excepcional de Calificación, formado por nueve profesionales del mundo de la sumillería y la comunicación, personalidades de influencia que trabajan en contacto directo con el consumidor, responsables de la selección de vinos en restaurantes de referencia, y cuyas trayectorias han sido reconocidas con importantes premios. De esos nueve catadores, siete han sido mujeres, lo que demuestra que las profesionales del vino ganan peso específico en el sector día a día.