Ha concedido 964 hectáreas en la Comunidad, la segunda con mayor superficie por detrás de Castilla-La Mancha
A nivel global, el Ministerio ha concedido 4.750 hectáreas, el cupo total establecido para este año, mientras que la superficie solicitada fue de 8.621, un 41,65 por ciento inferior a 2019. Como puede leerse en eldiasegovia.es, la distribución se ha realizado según lo establecido en la normativa comunitaria y nacional, además de tener en cuenta las limitaciones aplicadas en las zonas geográficas de determinadas denominaciones de origen protegidas.
Precisamente, esto último es lo que ha condicionado el reparto en el caso de Castilla y León, ya que Ribera del Duero abarcará prácticamente la totalidad de las hectáreas de nuevas plantaciones de viñedo solicitadas al limitar este año su crecimiento en 950, quedando fuera de este límite las replantaciones y las autorizaciones por conversión de derechos. Por su parte, la DO Rueda volvió a ser la más restrictiva y planteó limitar a tan solo una hectárea la autorización de nuevos viñedos para su ámbito territorial durante los próximos tres años. En este caso, el Consejo también restringió las autorizaciones de replantación y por conversión de derechos para los años 2020, 2021 y 2022.
Ante estas limitaciones, las 13 hectáreas de nuevos viñedos restantes concedidas por el Ministerio se repartirán entre el resto de zonas vitinícolas de la Comunidad. Además de Castilla y León y Castilla-La Mancha también se han concedido autorizaciones en otras autonomías, aunque ya lejos de las cifras de las dos anteriores y que han sido distribuidas entre: Cataluña (281), Extremadura (272), Comunidad Valenciana (151), Aragón (123), Baleares (67), Murcia (62), Andalucía (50), Galicia (43), Navarra (26), País Vasco (6), Asturias (5), Madrid (3) y La Rioja (1).
El 1 de enero de 2016 entró en vigor el actual régimen de autorizaciones de plantaciones de viñedo, que sustituye al antiguo sistema de derechos y que permite continuar con un crecimiento controlado del potencial de producción. El nuevo sistema permite obtener una autorización a partir de un cupo que se establece cada año para nuevas plantaciones. Para este año se estableció el 0,5 por ciento de la superficie plantada a 31 de julio de 2018, lo que equivale a 4.750 hectáreas.
El reparto de la superficie se ha realizado 15 días más tarde a lo previsto en años anteriores, debido a la adecuación de los plazos de la normativa de potencial productivo vitícola a las medidas excepcionales aplicadas por el estado de alarma. No obstante, los beneficiarios recibirán la notificación de las solicitudes concedidas por parte de la Consejería de Agricultura a más tardar el 1 de agosto de 2020, como ocurre en años anteriores.