Los ganaderos de vacuno se ven sobrepasados por las campañas de saneamiento en tuberculosis y lengua azul
El pasado 12 de abril, la Plataforma de Ganaderos Unidos celebró una concentración frente a la delegación territorial de la Junta de Castilla y León de Salamanca. Unas 3.000 personas ocuparon toda la explanada del acceso a la entidad, además de las inmediaciones, para lo que se cortaron dos calles próximas y el tramo correspondiente a Príncipe de Vergara.
Antes de las 12 de la mañana, familias ganaderas de bovino provenientes de toda la provincia de Salamanca, se afanaban por reunirse frente a la Junta. Incluso antes de la convocatoria de la concentración, ya era prácticamente imposible aparcar en un radio de 300 metros. Colapsados los aparcamientos y garajes cercanos, los salmantinos se personaron para protestar por el hartazgo que sufren los profesionales de la ganadería en la provincia charra. Pasadas las 12 del mediodía, se contaban por miles los manifestantes que portaron todo tipo de pancartas, pitos, cencerros, e incluso petardos, para hacer el mayor ruido posible y, durante dos horas, no hubo ningún altercado.
Los organizadores, que ya previeron la multitudinaria concentración a pesar de que el sector ganadero tenga numerosos compromisos diarios en las explotaciones, dispusieron de una plataforma y altavoces para hablar a la masa. La unión del sector se hizo visible cuando se actuó bajo las mismas premisas y colores. Y no provenía solo de la provincia de Salamanca, se acercaron también autobuses de Ávila, Cáceres.
El objetivo fue hacer ruido y que la administración viera que el sector está unido y cuál era su tamaño. Y se consiguió. Bajo el lema «Basta ya de arruinar al sector. Y por un cambio en la gestión sanitaria», los portavoces, Juan Luis Delgado, Jacinto Sánchez y Alfonso Castilla, tuvieron unas palabras para los manifestantes. Todos estuvieron de acuerdo en que «se ha perdido la ilusión» por el trabajo en la ganadería ya que tienen limitada su actividad, en algunas ocasiones sin sentido alguno, según los profesionales del campo. Por ello, los congregantes escucharon, gracias a Ramón Guarido, el manifiesto que tenía para la ocasión la Plataforma de Ganaderos Unidos y que resumía un decálogo de peticiones:
- Defender el programa sanitario centrado en el control frente a la erradicación, objetivo imposible mientras no se actúe contra todos los hospedadores de la enfermedad.
- Facilitar los movimientos a cebaderos con destino a matadero.
- Retomar todos los acuerdos de flexibilización de movimientos en los casos de positividad dudosa.
- Cumplir los acuerdos de programación de las campañas, respetando los periodos de difícil manejo de las explotaciones extensivas.
- Dar un servicio profesional, responsable y organizado por parte de los veterinarios encargados de las campañas, un cambio radical en los responsables de su desarrollo, encargar estas actuaciones a los propios veterinarios de las explotaciones (ADS).
- Incidir de una forma drástica en controlar los reservorios de la enfermedad en la fauna silvestre, en los entornos donde conviven con las ganaderías domésticas.
- Revocar la declaración de Zona de Especial Incidencia (ZEI) en las cuatro comarcas de Vitigudino, por lo ineficaz de las restricciones y el incumplimiento de los compromisos en facilitar determinados movimientos, al igual que de las compensaciones a los damnificados.
- Informar a los ganaderos de cada cambio en su estatus sanitario y los protocolos a seguir y las alternativas, con una explicación clara del origen de la enfermedad.
- Dotar de presupuesto suficiente para salvaguardar la viabilidad de las explotaciones, con indemnizaciones acordes con el valor del ganado, teniendo en cuenta el valor genético, lucro cesante y descapitalización de la ganadería, al igual que la eliminación de todas las tasas veterinarias por actos obligatorios de campaña.
Pasadas las 13 horas, los representantes entraron en la Junta, donde les recibió Eloy Ruiz, delegado territorial, quien escuchó activamente y comprendió el malestar y situación que viven las familias ganaderas de las explotaciones, sobre todo, de vacuno en extensivo. Sin embargo, el delegado aclaró que carecía de competencia para cambiar las cosas pero que esa misma mañana remitiría la misiva al presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernandez Mañueco. A la reunión también acudió Javier García Presa, jefe de Servicio de Agricultura y Ganadería, quien mostró su acuerdo con la mayor parte de las reivindicaciones ganaderas.
La Plataforma de Ganaderos Unidos informó al delegado y al jefe de servicio que el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Gerardo Dueñas, estaba enterado de las actuaciones, ya que se le había remitido días anteriores otra misiva informándole de las actuaciones y pidiéndole una reunión presencial, al igual que ocurre con el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco.
A las dos de la tarde, la manifestación se desconvocó sin incidentes con el descontento de los presentes ante la negativa del delegado territorial a salir y hablar a la masa. Los portavoces dejaron claro que éste solo es uno de los muchos pasos que se darán hasta conseguir que las familias ganaderas respiren aliviadas.