El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este lunes, 28 de marzo, un paquete de medidas con valor de 430 millones de euros; de los que 362 se destinarán a agricultura y ganadería; y 68, para pesca y acuicultura. Así, se pretende paliar los efectos que ocasiona, en el sector primario, el conflicto bélico ruso sobre Ucrania.
Para blindar el impacto económico de la guerra sobre el tejido productivo, Sánchez ha avanzado que el Gobierno aprobará una nueva línea de avales de créditos ICO por 10.000 millones de euros para cubrir las necesidades de liquidez provocadas por el aumento temporal del coste de la energía y los combustibles. Asimismo, se extenderá el plazo de vencimiento de los préstamos avalados por el ICO y el plazo de carencia para los sectores más afectados.
En cuanto a la industria gran consumidora de energía, se cubrirá el 80 % de los peajes y se elevará al máximo la compensación del CO2, reforzando, además, las ayudas directas al sector, en lo que va a suponer un paquete de medidas que superará los 500 millones de euros.
Junto a ello, el presidente valoró el acuerdo con las principales asociaciones del sector del transporte, que supondrán una inyección de más de 1.000 millones de euros, a través de la rebaja del combustible y la creación de un fondo de 450 millones de euros en ayudas directas a las empresas de transporte de mercancías y de pasajeros, según el tipo de vehículo. La cuantía alcanzará los 1.250 euros por camión, 900 por autobús, 500 por furgoneta y 300 por vehículo ligero.
Sánchez también ha subrayado que el Ejecutivo reducirá, de tres meses a un mes, el plazo de devolución del impuesto sobre hidrocarburos para aumentar la liquidez de los profesionales, y aprobará una ley que permita a los transportistas «trabajar con un precio justo», como se ha hecho con agricultores y ganaderos en la Ley de Cadena Alimentaria.