Especial Salamaq 2022 |EN POCOS DÍAS asistiremos a una nueva edición de la feria agraria más importante de España y, pese a que el virus sigue presente parece que la mortalidad no es tanta y nos permite retomar las actividades de manera normal. Salamaq en sí es una apuesta clara de la Diputación de Salamanca, un compromiso con el sector agrario de la provincia y una magnifica tarjeta de visita
para vender esta provincia en el resto de España y en el extranjero. Salamanca es una provincia que basa su economía en el sector primario y el agroalimentario ligado a éste, por lo tanto, todos los esfuerzos por salvaguardar este potencial son pocos.
Debo decir que el resultado tanto de la economía local como de la grandeza de la feria es fruto del esfuerzo de los agricultores y ganaderos, lógicamente, con los sectores que dan servicios a estos o los que, aprovechando unas buenas materias primas, desarrollan la cadena de valor, trasformando los productos y poniéndolos a disposición del consumidor; una simbiosis que se antoja perfecta entre todos los eslabones de la cadena, siempre y cuando se repartan el valor añadido equitativamente, cosa que desafortunadamente no pasa siempre. Hago este inciso por el hecho de que son muchos los sectores agrarios que, en este momento, lo están pasando mal. Esto quiere decir que están a muy pocos jornales para echar el cierre o transformarse en otra cosa. Y esto, más pronto que tarde, perjudica al siguiente eslabón, que no dispondrá de la materia prima basada en la calidad y zona de origen. En términos coloquiales se podría decir que se están cargando la gallina de los huevos de oro y muerta la gallina no hay huevos, ni mares de maíz, ni dehesas únicas, ni lechazo de Castilla, no tendremos quesos artesanos, pero tampoco habría Salamaq.
Este año, la feria cobra un incentivo muy importante para esta organización y también para el sector en ámbito europeo: el Congreso Ibérico Agrícola; una iniciativa nacida desde Bruselas, con carácter anual y de forma rotatoria, alternando localidades portuguesas con Españolas, se celebrara el 4 de septiembre coincidiendo con Salamaq. El congreso, organizado por ASAJA y la Confederación de Agricultores Portugueses (CAP), desarrollará ponencias de los diferentes sectores agrícolas y ganaderos con la interacción de los dos países; una unión que se antoja más necesaria que nunca y, pese a que las relaciones comerciales y sociales entre los dos países son buenas, estoy seguro de que se podrían mejorar más aún desde la perspectiva geográfica que afecta a Salamanca. Esta provincia está posicionada a muy pocos kilómetros de puertos marítimos: Aveiro, Oporto o, incluso, Vigo; pero con la particularidad que, desafortunadamente, nunca se ha visto el país vecino como una salida a los mercados del norte de Europa o del otro lado del océano. Unas buenas vías de comunicación posicionarían las fronteras de la provincia a dos horas de estos puertos, a 200 km de rutas de comercialización abiertas al mundo. Por lo tanto, toda la integración de España en Portugal y Portugal en España beneficiaria el sector agroalimentario local.
Este congreso, en el que se prevé que participe el presidente de la república Portuguesa y el Rey de España, al igual que los máximos responsables del sector agrario de ambos países, pretende ser un estímulo más para que estas relaciones sigan mejorando y quizá, también, para recordarle a estos responsables, la necesidad del desarrollo de vías de comunicación, que no se llevaron a cabo con los acuerdos de los Programas de Cooperación Transfronteriza que desarrollaron entre 2007 y 2013 y que, a mi entender, se olvidaron en la totalidad de nuestra provincia.