El sector celebró el día de su patrón con una misa y una procesión en Salamanca

Salamanca se engalanó para festejar el tradicional día del patrón de los agricultores y ganaderos, donde, en la Iglesia de San Pablo (Salamanca), como cada año, fue tributado con una eucaristía por haber sido un agricultor humilde y gran devoto de la Virgen.

«En estos momentos no solo le pedimos que llueva, pues tenemos un año climatológicamente muy bueno, ahora necesitamos que se tengan en cuenta las propuestas del sector agrario, las modificaciones de la PAC, la reducción de burocracia, todas las cuestiones relacionadas con la sanidad de la ganadería o precios para nuestros productos”, manifestó ayer Juan Luis Delgado, presidente. Durante la solemnidad vivida en la misa, el sector del campo también trasladó algunas peticiones a San Isidro Labrador, entre ellas “un climatología favorable” para los campos salmantinos. Así como la elaboración de una nueva PAC “más productiva y realista”, que exista “menos burocracia”, “más libertad al sector” y que se ponga en valor “el producto nacional”.

El presidente de ASAJA también habló de la enfermedad de la ‘lengua azul’, así como la falta de dosis de vacuna: “La enfermedad está incluida en las peticiones del sector, dentro de las cuestiones sanitarias. Esperemos que este año no sea como el pasado, ni mucho menos, según Juan Luis Delgado, que añadió que “desgraciadamente están sufriendo los efectos del 2023”. “Confiamos en que se reduzcan las infecciones en el ganado ovino, caprino y bovino porque sino muchas ganaderías no van a poder superar la situación”, añadió. Respecto a la gripe aviar, manifestó que Salamanca es una provincia donde no existe mucha incidencia de apicultura. “Es cierto que es un problema muy difícil de controlar”, añadió el presidente de ASAJA Salamanca.

Después de la eucaristía, los profesionales del sector agrario, familiares y amigos, confluyeron un ‘paseo’ por la plaza de Colón, en el que
procesionaron junto al santo. Tras unos minutos en los que su figura copó todo el foco de atención, varias mujeres bailaron durante el recorrido la charrada salmantina, al son de la gaita y el tamboril, característica de la provincia. Además, el sacerdote repartió garbanzos entre los presentes a modo de homenaje al campo.