“Nuestro punto débil respecto a otros países no es la competitividad, sino los céntimos que pierde el ganadero a favor de industria y distribución”, subraya
Ante la próxima desaparición, en apenas un mes, del sistema de cuotas de leche, ASAJA de Castilla y León ha reclamado hoy en la Mesa Regional de la Leche de vacuno que la administración “se alíe y refuerce” al sector ganadero para que supere un reto complejo y que acarrea cambios sustanciales en el enfoque productivo, industrial y comercializador de un producto básico para el sector primario y para la sociedad en su conjunto.
Aunque el cambio de sistema es fruto de un largo proceso negociador en el seno de la Unión Europea, en un contexto global comunitario de liberalización de las producciones hasta ahora sometidas a cuotas (como ya ha ocurrido con el sector remolachero-azucarero), ASAJA considera que tanto la administración nacional como la autonómica tienen que “jugar sus cartas para apoyar en lo posible al sector ganadero de leche en este difícil paso al nuevo sistema”.
ASAJA subraya el enorme esfuerzo de modernización impulsado por los propios ganaderos, “porque en leche, más que en ningún otro sector, aumentar el tamaño de la explotación ha sido necesario si se quería sobrevivir” y añade que hoy por hoy el nivel de competitividad productiva de los ganaderos españoles “es tanto o más eficiente que el del resto de países europeos”. Tampoco es ya cierto que exista una gran diferencia de precios finales de la leche en otros países competidores, como Francia, Alemania, Bélgica u Holanda, ya que en los últimos años los umbrales en los que se trabaja son casi simétricos. El punto débil de nuestro país, casi endémico, es la debilidad de la estructura de comercialización: en esos países el sistema de cooperativas e interprofesionales es muy fuerte y logra que como media los ganaderos reciban 3 céntimos más por litro de leche, mientras que aquí ese beneficio se pierde en otros eslabones de la cadena alimentaria. Para ASAJA, esto obliga a un replanteamiento del peso que debe tener el sector primario en la cadena de valor, “para lo que es imprescindible el apoyo de la administración, apretando en lo posible las tuercas a industria y distribución y muy especialmente actuando de oficio para eliminar prácticas demoledoras para el sector como la venta a pérdidas”.
Otras medidas que ha pedido ASAJA en la Mesa regional es que tanto en las ayudas directas del nuevo periodo PAC como en las que el sector espera que se convoquen próximamente a la modernización del explotaciones el sector lácteo sea tratado con especial cuidado, porque es ahora cuando tiene graves problemas de capitalización y necesita apoyo para poder plantar cara al nuevo sistema”.