Febrero 2020 | HOY NO RECORDARÉ los mil y un problemas que al sector nos desborda. No protestaré porque, en estos días, el Ministerio de Agricultura está en fase de descomposición, con un presupuesto a la baja y dividiéndolo para dar cabida a otros ‘sillones’, para dar respuesta a otros ‘votos’ que, pese a ser minoritarios, se saben vender mejor que nosotros.
No recordaré, que la Política Agraria Común está en sus horas más bajas. Somos un país menos, uno menos a poner ‘pasta’, uno más a imponer aranceles a nuestros productos.
No recordaré, que seguimos sin una ley de la cadena alimentaria. Una ley que regule la cadena de valor de los productos de primera necesidad, que las grandes superficies no nos usen para enriquecerse, disparando los precios de los productos que a nosotros solo nos dejan el sudor y la desesperación de quien espera eternamente a que algo mejore. Hoy, pese a que podría tener más motivos que nunca para hacer una y mil críticas, haré justo lo contrario.
Quiero mostrar el agradecimiento a toda la familia de esta organización y, por extensión, al sector agrario. Quiero dar las gracias porque, en los pasados días, esta organización ha vivido dos momentos históricos, dos jornadas precedidas de mucha ilusión, mucho trabajo y no menos nervios; de un equipo de trabajadores que seguro que tienen casi tantos defectos como yo, pero, cuando se les encomienda un objetivo, podemos estar seguros de que se cumplirá, y con creces.
Rebeca, Ana, Jaime, José, Francisco, Verónica, Encarna, Marisa, Juan, Trini y Mariano son los once componentes del equipo de ASAJA Salamanca. Y son ellos, los que con su constancia y cercanía al socio, han logrado que culminemos los momentos más satisfactorios de quienes dirigimos la organización.
Celebramos la inauguración oficial de las nuevas oficinas. Y lo hicimos con un gran respaldo de los socios al igual que de tantísimas empresas colaboradoras de esta casa. Un total respaldo de organizaciones, cooperativas, asociaciones y la totalidad de los responsables políticos provinciales y regionales, con el presidente de la Junta a la cabeza, consejero de Agricultura, delegado territorial, presidente de Diputación, subdelegada del Gobierno, diputados provinciales, alcalde de Salamanca y nuestros presidentes: regional y nacional. Tampoco faltaron los grandes protagonistas de la historia de ASAJA Salamanca, sus tres expresidentes: Juan, Vicente y Luis Ángel; ni los veteranos y primeros directivos artífices de la unión que dio nombre a ASAJA Salamanca.
El otro gran momento, ha sido la tractorada del pasado día 30. La participación fue masiva. Desbordó nuestras expectativas y colmó nuestras caras de orgullo.
Este hecho tiene dos lecturas, una negativa y otra positiva. Lo negativo es que los agrarios acudimos en masa por la realidad del sector, la crisis constante y la extrema gravedad a la que nos enfrentamos. La parte positiva es la respuesta de agricultores y ganaderos.
Quiero quedarme con esta última lectura porque, en ella, veo la realidad de lo que yo defiendo; la unidad entre todas las opas, cooperativas y todos los implicados en la pervivencia del mundo agrario y el rural, que es lo mismo.
Me quedo con esas caras de felicidad y emoción ante la invasión de Salamanca por 300 tractores, me quedo con el apoyo de la ciudadanía charra (3.000 personas), me quedo con vuestro respaldo y me quedo con la imagen de civismo que demostramos.