ASAJA anima a los consumidores a que den preferencia a los alimentos autóctonos
Coincidiendo con las fechas navideñas, y como ya es habitual, ASAJA solicita a los consumidores que apoyen al sector agroganadero de Castilla y León pidiendo en sus puntos de distribución habituales productos autóctonos. Esta petición se refuerza con el mensaje “En Navidad comparte lo mejor, compra lo nuestro”, que centra la felicitación que la organización agraria envía y transmite estos días por las redes sociales (Twitter, Facebook e Instagram) y publicaciones propias, con el ánimo de involucrar “en estas fechas navideñas, y también a lo largo de todo el año”, al mayor número posible de consumidores en la defensa del producto local, que reúne las mejores cualidades de calidad y sabor, además de ser una excelente oportunidad de apoyar al sector agrícola y ganadero de Castilla y León. Por ello, este año la organización agraria insiste en la importancia de leer el etiquetado de los alimentos que se compran, para verificar su origen.
Este año 2019, el lema de la campaña incide en la idea de “compartir”, puesto que parte fundamental de los encuentros de estas fechas se basan precisamente en eso, compartir una comida con nuestros familiares, amigos y compañeros. “Los alimentos son un elemento importantísimo en la tradición navideña, no podría entenderse esa comida de Navidad, esa Nochebuena o Nochevieja sin los buenos productos de la tierra”, señala Donaciano Dujo, presidente de ASAJA Castilla y León.
Muy especialmente, ASAJA invita a los ciudadanos, a los consumidores de Castilla y León, a que pidan lechazo criado en la región, no solo sacrificado aquí, ya que podría ser importado; así tienen garantizado un producto de máxima y probada calidad.
Además del lechazo, ASAJA recuerda que hay otros muchos productos de máxima calidad que no pueden faltar en estas fechas navideñas, como el cochinillo, la excelente ternera, lácteos y quesos, embutidos de primera calidad, legumbres, verduras, frutas y frutos secos, mieles y dulces… y por supuesto, los vinos, bandera de la región, y los estupendos espumosos, muchos de ellos amparados por el gran trabajo de las denominaciones de origen y sellos de calidad, además de por el “corazón amarillo” de Tierra de Sabor.