Ante el apartado de cultivos agroindustriales sostenibles, en la ayuda de agroambiente y clima, se adquieren unos compromisos de obligado cumplimiento para los productores, durante el periodo de vigencia del contrato plurianual. Los beneficiarios deberán acoger a la ayuda anual al menos el 80 % de la superficie básica del contrato y no superar el 120 %. La variación permitida cada año respecto al año anterior no podrá ser superior al 20 %.
Además de mantener actualizado el cuaderno agroambiental de la explotación, se debe respetar a cuatro hojas respetando un mínimo de tres años sin la implantación de remolacha azucarera en la misma superficie de la parcela. Sin embargo, cuando esté a tres hojas, se respetará un mínimo de dos años sin la implantación de la remolacha y con cultivos diferentes, para que no se repita el mismo cultivo en ninguno de los tres años de la rotación.
Bien es conocido que se deberá asistir al menos a una jornada formativa presencial completada con formación en línea, hacer un análisis de suelo para el programa de abonado, incorporar al suelo las hojas y restos de la cosecha de remolacha, incluir en la rotación de la explotación el cultivo de leguminosas, proteaginosas y/o crucíferas, cumplir con la condicionalidad y con los requisitos mínimos de fertilización, fitosanitarios…
No obstante, se debe tener mayor ojo avizor en el caso de zonas vulnerables por nitratos. En estas situaciones: realizar una enmienda una vez, durante el periodo de compromiso, con leguminosas, proteaginosas o crucíferas, para su enterrado en verde, previo a la siembra del cultivo de remolacha. Este compromiso se podrá realizar en un año sobre la totalidad de la superficie comprometida o en varios años de forma que, al final del periodo, se alcance la totalidad de la superficie.