ASAJA ya ha puesto el grito en el cielo en repetidas ocasiones para denunciar la escalada de costes de los productores y, en esta ocasión, se ha sumado el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, que participó el pasado 8 de noviembre en el Consejo Consultivo de Política Agrícola Común presidido por el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas.
Dicho encuentro es el preparatorio para el Consejo de Ministros de la Unión Europea que se celebrará el 15 de noviembre, en Bruselas.
En el Consejo Consultivo, se ha tratado la situación de los mercados agrícolas en la Unión Europea, donde se aprecia una situación muy preocupante por la falta de materias primas agrícolas en algunos territorios, especialmente cereales para la alimentación de la ganadería.
La situación en España no es mejor; se están viendo fuertes incrementos en los precios de cereales, llegando a cotizar ya la cebada a 300 euros la tonelada, no se ha conocido este valor nunca, un 60 % más cara que el año pasado por estas fechas.
Igualmente está ocurriendo con el trigo forrajero que también ha superado ese precio, y el maíz que cotiza a 280 euros la tonelada, un 40 % más caro que el año pasado. Además se están apreciando signos de escasez en estas materias primas, provocando una escalada importante en el precio de los piensos para la ganadería.
Así, el consejero ha expresado su preocupación, ya no sólo por el incremento de los precios en las materias primas que forman la base de la alimentación de la ganadería de España, también por el incremento en los costes de producción de los fertilizantes que han subido este año hasta un 85 %, es el caso del sulfato amónico, o los fosfatos con un incremento del 80 %, que va a afectar a las siembras de la nueva cosecha y a su estado vegetativo.
“Nos vamos a encontrar con una sequía, aunque llueva, por el coste de los fertilizantes. Se producirá menos ya que con esos precios se utilizarán menos fertilizantes de lo que necesitan nuestros cultivos y consecuentemente tendremos inferior cosecha, realmente como si fuera una sequía”, ha dicho Carnero.
Pero además los costes de la energía están afectando muy negativamente a los agricultores y a los ganaderos. La energía eléctrica se ha incrementado en lo que va de año un 40 %, los combustibles líquidos un 32 %, el gas un 8’6 %. Estas subidas también encarecen los costes de producción y el mercado no da respuesta con los precios percibidos por los agricultores.
Los costes de producción provocarán un tsunami que inundará al consumidor
“Se avecina un tsunami, y disminuirá la producción, si los precios no responden para compensar el incremento de los costes o si no se vuelve a la normalidad”, ha indicado el consejero. Y ha añadido, “esa ola será espectacular, porque afectará al consumidor en precio y en cantidad. Es el momento de tratar este asunto antes de que nos inunde el tsunami”.
Es un problema generalizado en España y requiere una acción coordinada. Los fertilizantes se importan, en materia prima para piensos somos deficitarios y también importamos, y en energía necesitamos frenar esa escalada especialmente en los sectores productivos, y servicios paralelos, incluyendo transformación y distribución. No se ha conocido una situación similar y con tanto riesgo para la producción agraria.