El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha iniciado el proceso de consulta pública de una propuesta de modificación de la normativa que regula el Programa de Apoyo al Sector Vitivinícola Español (PASVE) para adaptarla a las flexibilidades que permite la Comisión Europea para paliar los efectos de la Covid-19 en este sector. Este programa distribuye más de 202 millones de euros anuales entre viticultores, bodegas y otros operadores vitivinícolas en España.
El proceso de consulta pública se abrió el lunes día 20 de septiembre con el envío a las comunidades autónomas y a las organizaciones representativas del sector vitivinícola de la propuesta de modificación del Real Decreto 1363/2018, de 2 de noviembre, para la aplicación de las medidas del PASVE en el periodo 2019-2023. El periodo de consulta pública se prolongará hasta el día 29 de septiembre.
El objeto que motiva esta modificación es la necesaria adaptación de las medidas de reestructuración y reconversión de viñedo, inversiones, cosecha en verde y promoción en terceros países a las flexibilidades que permiten para este programa sectorial las recientes modificaciones aprobadas por la Comisión Europea a los distintos reglamentos (números 592, 600 y 884 de 2020) para paliar los efectos de la Covid-19 en el sector del vino, entre otros.
Esta modificación se tramitará de urgencia, y permitirá ampliar a 2022 los elementos de flexibilización que se permitieron ya para los años 2020 y 2021, tanto en el pago de las ayudas al sector vitivinícola, eximiendo de determinadas penalizaciones, como en la modificación de las operaciones.
El Real Decreto 1363/2018 tiene por objeto establecer la normativa básica aplicable a una serie de medidas recogidas en el PASVE 2019-2023, presentado por el Reino de España ante la Comisión Europea, de conformidad con lo dispuesto en el Reglamento 1308/2013 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 17 de diciembre de 2013, por el que se crea una organización común de mercados de los productos agrarios. En lo relativo a los programas de apoyo en el sector vitivinícola, se contemplan líneas de actuación diferenciadas destinadas, entre otras, a la promoción en terceros países, cosecha en verde, destilación de subproductos, reestructuración y reconversión de viñedos e inversiones en bodegas.