(*)Donaciano Dujo Caminero
Queridos socios y simpatizantes de ASAJA-PALENCIA: no se crean ustedes que el título de este artículo es, como podría parecer, promesas de un novio a su prometida. Se trata de la frase y los resultados que con más intensidad estamos escuchando en estos días de campaña electoral.
Durante las sucesivas campañas electorales que a lo largo del tiempo democráticamente se han sucedido en los últimos años, todos nosotros hemos comprobado que es el momento en el cual los políticos más visitan nuestros pueblos y más cerca del ciudadano se encuentran.
Mensajes de optimismo, promesas de mejora para la situación penosa por la que atraviesa la agricultura y la ganadería de Palencia, palmadas en la espalda y alguna que otra concesión de calderilla es lo que en estos días estamos viviendo en nuestros pueblos.
La aproximación que los aspirantes a políticos tienen en estos momentos al ciudadano y sus problemas se van olvidando una vez que el sillón se hace suyo. No es lo mismo la cercanía de estos días de quienes nos representan, que la que tuvieron con nosotros hace poco, por poner un ejemplo, en las Cortes de Fuensaldaña. No son lo mismo las promesas de solución a nuestros problemas que con tanta intensidad estamos oyendo en estos momentos que el día a día, la burocracia a que nos tienen acostumbradas las distintas administraciones. Nadie diría que las mismas personas que nos visitan ahora van a ser y son casi los mismos responsables que han legislado y nos han defendido durante el anterior mandato y posibles siguientes.
Hablo de aquellos que en nuestros municipios muchas veces nos hacen casi imposible la vida en el sector agrícola y ganadero; aquellos que desde las distintas administraciones -y principalmente la regional- se olvidan de nuestros problemas y de quiénes somos, y sólo se empeñan en protagonizar eslóganes electorales que a la ciudadanía del medio urbano le gusta oir: desarrollo rural y respeto en el medio ambiente. Algo que muchos desconocen, que muy pocos desarrollan y que sobre todo, todos olvidan de quiénes son los verdaderos protagonistas, los agricultores y ganaderos que vivimos en el entorno rural y hacemos el medio ambiente.
No nos tocan ahora elecciones nacionales ni europeas, pero también de ello podríamos hablar, porque los partidos políticos son de ámbito nacional y nos vemos en el desamparo en que las políticas europeas y nacionales nos están dejando al sector agrícola y ganadero.
Los probemas que los jóvenes están teniendo para incorporarse, las ridículas pensiones que nuestros mayores cobran a la hora de jubilarse y la preocupación del sector ante la aprobación de la reforma de la PAC chocan con el trabajo de ASAJA que siempre ha apostado, apuesta y apostará por la defensa del empresario agrario y el valor de su producción, por el reconocimiento de su trabajo a través de los precios dignos de sus productos y sobre todo, por conseguir las mejoras económicas y sociales para dignificar esta profesión y hacerla atractiva para nuestros hijos.
Antes de despedirme de la editorial de este mes de mayo y coincidiendo con unas perspectivas de cosecha aceptables para nuestra provincia, y haber honrado como se merece nuestro patrón San Isidro, quiero concluir manifestando que la agricultura es la profesión propia del sabio, la más adecuada al sencillo y la ocupación más digna para todo hombre libre, y libremente deberemos votar a nuestros representantes políticos para que esas promesas se cumplan.
(*)Presidente ASAJA-PALENCIA
Presidente ASAJA C y L
