La Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE) avanza por el noroeste de la Península Ibérica. Afortunadamente, aún no se han constatado casos este año en Palencia, donde sí se detectó su presencia en 2023, en una explotación de la zona veterinaria de la capital. Con respecto al anterior parte ministerial (28 de agosto), se informa de la presencia de la enfermedad en «varias explotaciones de bovino», sin especificar número, en Cantabria, León, Zamora, Salamanca y Burgos. También hay nuevos casos en Galicia (Lugo y Orense), País Vasco (Guipúzcoa y Vizcaya), Navarra y Catauña (Lérida). ASAJA reclama que las administraciones central y autonómica que ofrezcan ayudas a los ganaderos para afrontar las pérdidas y los gastos que la EHE implica para las explotaciones. También pide nuestra organización que cubran el coste de la vacuna, como en Francia.

En el mapa facilitado el pasado día 4 de septiembre por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) se aprecia una importante presencia de la EHE en comarcas de León no afectadas en 2023. En esta provincia, prácticamente todas las zonas veterinarias han detectado casos desde que se comprobó el primero en España, en el sur peninsular, el 18 de noviembre de 2022. 

La provincia de Burgos también ha registrado casos en casi todas las zonas veterinarias entre 2023 y 2024, sin llegar a la totalidad de las áreas, como sí se ha producido en cuatro provincias de Castilla y León, como se aprecia en el mapa: Ávila, Salamanca, Segovia y Zamora.

También en Cantabria ha aparecido la EHE en todas las zonas veterinarias (a fecha de hoy, en prácticamente la mitad hubo casos en 2023 y en el año actual). Sin embargo, los expertos han destacaso una importante presencia en zonas que no se vieron más inmunizadas al padecer casos en la pasada campaña (áreas más oscuras del mapa), tanto en el noroeste de la península (Lugo, Pontevedra, Orense, León) como en el extremo nordeste (Gerona y Barcelona). Hasta ahora, no ha sucedido así en la provincia de Palencia, territorio casi libre de EHE, salvo ese caso puntual en 2023.

Las zonas veterinarias con nuevos casos en Castilla y León con respecto al anterior parte son los siguientes (aparecen en negrita las comarcas que NO habían sido afectadas en 2023):

  • LEÓN La Bañeza, Riaño, Fabero, Carrizo y León capital
  • ZAMORA: Zamora capital
  • BURGOS: Valle de Sedano, Villarcayo de la Meridad de Castilla la Vieja y Espinosa de los Monteros
  • SALAMANCA: Vitigudino

La EHE ha circulado históricamente por América del Norte, Australia, Asia y África. Nunca se había detectado en la Unión Europea hasta que, en noviembre de 2022, las autoridades italianas comunicaron la presencia del virus en ganado bovino de las islas de Cerdeña y Sicilia. En cambio, la enfermedad no ha circulado hasta ahora en los archipiélagos españoles.

DECLARACIÓN OBLIGATORIA. ASAJA-Palencia recuerda que la EHE no afecta en ningún caso al ser humano, que todos los productos del bovino (principal sector ganadero afectado) pueden consumirse con normalidad, y que se trata de una enfermedad de declaración obligatoria por parte de las explotaciones.

Po ello, ante cualquier sospecha clínica, es obligatorio que el profesional lo comunique a los servicios veterinarios oficiales de su zona. Asimismo, nuestra organización recomienda, en tanto se generaliza la aplicación de la vacuna que ha empezado a administrarse este mismo verano, vigilar las explotaciones y adoptar medidas de desinsectación en animales e instalaciones como medidas preventivas de una enfermedad que transmiten unos mosquitos del género Culicoides. Además, para minimizar los daños y los síntomas, deben aplicarse tratamientos veterinarios a los animales enfermos lo antes posible, caso de que se confirme la EHE.

Es una enfermedad vírica que afecta a rumiantes domésticos y salvajes (ciervos, gamos y corzos). En el ganado vacuno, que es donde está ocasionando más daños a los profesionales, tanto directos como indirectos, la EHE suele causar una clínica moderada y autolimitante, que en los cuadros más graves genera secuelas e incluso la muerte del animal. El ganado ovino puede infectarse, pero desarrolla poco la enfermedad; en tanto el caprino raramentes se infecta, aunque no es descartable./