Hoy, día 22 de marzo, es el Día Mundial del Agua, líquido elemento al que le debe mucho toda la humanidad, por ser fuente de vida. En la provincia de Palencia somos muy dependientes de ella para abastecer más de 70.000 hectáreas de regadío que dispone nuestro territorio. Son relativamente pocas y, en muchos casos, carentes del agua necesaria para funcionar a pleno rendimiento. Y no es que no llueva en nuestra provincia, sino que no hacemos acopio como se debería, por una falta crónica de infraestructuras de almacenamiento, unida a la ausencia, por parte de la Confederación Hidrográfica del Duero, de la ambición necesaria para dar solución a este problema. Parece que la política de la CHD se inclina por cruzarse de brazos, acaso pensando que si llueve poco, es mejor no invertir en infraestructuras que guarden esa agua.
Afortunadamente, el indicador de ‘Sequía prolongada’ ha vuelto a niveles de «normalidad», tanto en el sistema Carrión como en el sistema Pisuerga, que lo abandonó en enero (fue el último sistema en volver a la normalidad de toda la cuenca del Duero). En cuanto al índice de ‘Escasez’, el sistema Carrión también se encuentra en la «normalidad», mientras el sistema Pisuerga está en «prealerta» (tras haber permanecido un año en las situaciones de «alerta» y «emergencia»), cierto es que rayando la «alerta», según los indicadores manejados por la CHD.
Según la propia web de la Confederación, el embalse de Camporredondo (sistema Carrión) es capaz de almacenar 70 millones de metros cúbicos de agua (es decir, 70 hectómetros cúbicos (hm3). En las últimas fechas hemos visto como la CHD, dentro del apartado de «situación de los embalses» ha ‘birlado’ 1,3 hm3 a este embalse, e indica que su capacidad es de 68,7 hm3. A fecha de hoy, 22 de marzo, el sistema Carrión —capaz de retener, con esas nuevas cifras, hasta 163,7 hm3 de agua— embalsa 150,8 hm3 (más del 92%), y libera agua a razón de 12,4 metros cúbicos por segundo (m3/s. Es una pena no poder embalsar más agua en el sistema Carrión y que se esté yendo al mar. Las matemáticas asustan, porque ese ritmo de desembalse equivale a desaprovechar 0,86 hm3 al día.
En el sistema Pisuerga, cuya capacidad total asciende a 315,7 hm3, la situación actual es mejor que la del año pasado, ya que dispone de 150,3 hm3 (cerca del 48% de esa capacidad), mientras que en las mismas fechas de 2022 contaba con 135,2 hm3. No obstante, la situación se mantiene muy preocupante, ya que la media de la década ronda los 216 hm3, muy por encima de los datos actuales.
Ya indica la CHD en sus informaciones que «las reservas existentes en los embalses del Pisuerga, más las reservas en forma de nieve, suponen menos del 48% de la demanda de la unidad territorial Pisuerga», situación que «no ofrece certeza de que las demandas de estas zonas puedan ser atendidas adecuadamente en el presente año hidrológico», y augura que «la disponibilidad de agua será limitada para los riegos que dependen de este sistema».
Las Juntas de Explotación se celebrarán los días 28 (sistema Carrión) y 29 (sistema Pisuerga) de este mes, paso previo a la Comisión de Desembalse que decidirá la dotación que se otorgará a nuestros regantes. Esperemos que la climatología de la primavera acompañe a los regantes del Carrión, que sufren una carestía histórica de regulación y que necesitan ver rellenar sus embalses con las aguas de estos meses y con el deshielo; y a los del Pisuerga, que vuelven este año a tener carencia de agua embalsada. Los regantes de la provincia de Palencia seguirán padeciendo el déficit estructural de nuestros sistemas, que no se procura corregir con inversiones adecuadas: por eso, aquí ni siquiera el año de nieves nos garantiza un año de bienes./