Por Alfonso Núñez
Un año más ASAJA-PALENCIA ha celebrado su asamblea general donde hemos aprobado las cuentas de la organización y el presupuesto para el próximo año. Lo primero que quiero es agradecer vuestra participación e interés mostrado en esta convocatoria anual.
Hemos querido aprovechar esta reunión para abordar todos los temas que conciernen al sector agrícola y ganadero de la provincia. Los temas de actualidad y los problemas que venimos arrastrando desde hace meses han quedado reflejados en el informe de quien arriba firma, en el convencimiento de que eran los que preocupaban a nuestros socios.
No podemos obviar la situación de transformación que está sufriendo el sector. Muy poco tiene que ver la situación de la agricultura de hoy con la de hace sólo unos años. Los que estos días han visitado las oficinas de ASAJA-PALENCIA, se han encontrado con 30 profesionales atendiendo a los afiliados de nuestra organización, hablamos del Sig-Pac, Derechos de Pago Único, Ayudas Acopladas, Desacopladas, Condicionalidad, Artículo 69, Modulación, Corrección Financiera, Bienestar Animal, etc. Son términos que con la mayor naturalidad, hemos incorporado a nuestra profesión y nuestras vidas.
Hace ocho años, ninguna de esas palabras estaba en el diccionario de la agricultura y ganadería y ahora presiden nuestra actividad, y no solo eso, también en muchos casos la condicionan e incluso llegan a hacernos esclavos de una burocracia tan absurda como injustificada, y para la que las distintas administraciones nunca tienen respuesta ni soluciones. Nos llevan a vivir siempre pendientes de plazos, y de forma provisional, lo que hoy vale, mañana hay que cambiarlo. En esta profesión es imposible hacer planes de futuro. Nos lo están poniendo muy difícil.
Necesitamos que tanto la administración central, como la autonómica apuesten decididamente por nuestro sector. ¿Que pasa con las presas del Valdivia? ¿Qué ha pasado con Castrovido? Los agricultores están de nuevo haciendo un enorme esfuerzo por mejorar sus explotaciones y nuestros políticos no se mueven y cuando lo hacen es para poner pegas y frenar iniciativas. No podemos vivir cada año con la incertidumbre de saber si podremos desarrollar una campaña normal de riegos. Miramos con envidia sana el futuro de otros agricultores, por el mero hecho de que en sus provincias se acometieron grandes obras hidráulicas y por eso hoy lo tienen más fácil.
Nuestras ganaderías no pasan por los mejores días, la carne y la leche, tanto de ovino como de vacuno, están soportando una crisis de precios brutal. Además hemos comprobado como se juega con un sector, para hacer política.
En Palencia tenemos las mejores explotaciones ganaderas de España, creadas con mucho esfuerzo humano y económico, con importantes inversiones en equipos e instalaciones, y con muchos millones de pesetas gastados comprando cuota. Pues bien, al actual Gobierno no le importó nada aprobar un Plan que condenaba a las explotaciones de futuro a no poder crecer más, y acababa de un plumazo con el valor patrimonial creado durante generaciones.
Pero el mayor problema que desde ASAJA vemos en estos momentos, es que los precios de nuestros productos están por los suelos: cereales, carne, leche, hortícolas, etc, mientras que lo que consumimos para producir tiene unos precios prohibitivos. Nunca los fertilizantes y combustibles han estado tan caros. Y además estamos totalmente abandonados por nuestras administraciones
Queremos mirar al horizonte con optimismo, y tenemos pocos motivos, estamos abiertos a cualquier cambio, para rentabilizar nuestras explotaciones. Ahora mismo parece que los cultivos energéticos pueden ayudarnos un poco, en la búsqueda de alternativas rentables y desde ASAJA no le perdemos la cara.