La sesión de la Lonja de León celebrada este miércoles, 16 de enero, ha deparado importantes subidas en la cotización de los cereales y, sobre todo, de la patata, en todas sus variedades. Si los primeros reaccionan a la rebaja de perspectivas de cosecha de grandes productores como Estados Unidos, Rusia, Argentina y Brasil, la segunda se encarece ante la baja calidad de las importaciones de tubérculo, según explican desde la lonja leonesa.

Hacía tiempo que no se veían subidas tan considerables en los principales cereales: nueve euros por tonelada en la cebada, siete en el trigo y cinco en el maíz. Más modesto son los retoques en el centeno y la avena, con sólo dos euros por tonelada.

Tanto en el trigo como en la cebada se habrían recuperado los precios del tramo final de la campaña 2022-2023. Dicho de otro modo, tras retomarse la cotización después de la pasada cosecha, nunca habían alcanzado ese nivel respectivo de los 225 y 210 euros por tonelada en toda la campaña 2023-2024.

POSIBLE VOLATILIDAD. Desde la Lonja de León advierten, no obstante, de la inminente toma de posesión de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, «cuyas medidas prometidas pueden agitar los mercados agrícolas y provovar volatilidad».

Es decir, el mercado nacional del cereal seguirá mirando de reojo el contexto mundial y, en modo alguno, puede considerarse esta reacción como síntoma de que el grano vaya a situarse en los niveles que garanticen la rentabilidad de las explotaciones a los costes de producción actuales.

PROBLEMAS CON EL TRIGO EN RUSIA. La lonja leonesa explica que la subida acusada esta semana se debe a la rebaja en la previsión de cosecha y existencias puesta de manifiesto el pasado viernes con el informe del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, así como de la sequía que afecta a determinadas regiones de Brasil y Argentina, otras dos potencias cerealistas, pero también demográficas (y por tanto, consumidoras de cereal): entre los tres países americanos suman más de seiscientos millones de habitantes.

Asimismo, en el primer país exportador de trigo, Rusia, se vaticinan menores producciones de este cereal, debido a las malas condiciones atmosféricas (poca humedad y temperaturas más altas de lo normal), según indican esas mismas fuentes.

APRECIO DE LA PATATA NACIONAL. Por lo que respecta a la patata, la variedad agria sube hasta los 350 euros/tonelada, lo que representa setenta euros más en una sola sesión. En las otras variedades la subida tampoco es manca, con una horquilla de entre cuarenta y cincuenta euros más por tonelada.

La Lonja de León explica que estas fuertes subidas «se deben principalmente a que la patata importada no está cumpliendo las expectativas de calidad y conservación que se esperaba, lo que hace que la nacional esté más buscada; y aunque también tiene problemas de conservación, ofrece más garantías».

En una próxima entrada de la web analizaremos con más detalle la situación del mercado de la patata.