La cotización de los lechazos mantiene su recuperación en esta segunda quincena de junio, como corresponde a esta época del año. Según los datos de la Mesa del Lechazo de Castilla y León, los precios que actualmente percibe el ganadero se sitúan en torno al 10 % más que hace un año, tras constatarse en la última sesión de la lonja una nueva subida de veinte céntimos de euros por kilogramo. Esa escalada viene registrándose prácticamente de manera regular desde mediados de abril.

Tras una primavera de alzas, los ganaderos de ovino de carne están expectantes ante la evolución de su producto en verano y el primer tramo del otoño. Cierto es que de manera más amortiguada, la subida de la cotización de los lechazos se mantuvo constante en estos meses de 2023 y hasta el puente de la Constitución, que es cuando los precios tocaron techo.

Las tablillas de la Mesa del Lechazo de Castilla y León, con arreglo a su lonja de referencia (Villalpando, Zamora) recogen ahora subidas interanuales en el entorno del 10 %. Llega al 11 % en el caso del lechazo IGP (Identificación Geográfica Protegida), que se está pagando a 5,55 euros/kilo, según esta mesa regional. La subida con respecto hace un año no llega por décimas al umbral del 10 % en las otras dos categorías: lechazo Tierra de Sabor (9,7 %) y lechazo para sacrificio sin marchamo de unos once kilos de peso (9,9 %).

También hay una significativa revalorización (+25,5 %) de la cotización del lechal de 12 a 16 kilos para cebar, que se sitúa esta campaña, desde mediados de febrero, en torno a los 61,50 euros por cabeza, frente al suelo de 49 euros/cabeza que se anotaba la mesa autonómica hace un año y prácticamente durante todo el verano de 2023.

VACUNO DE CARNE. Panorama de estabilidad, e incluso leves correcciones a la baja, presenta el vacuno de carne, a tenor de lo sucedido este lunes, 24 de junio, en la Lonja de Salamanca, donde una vez más perdieron céntimos las terneras de más peso y los añojos, mientras la ternera de hasta 270 kilos repite cotización. Por su parte, la vaca sigue apreciándose ante la escasez de oferta por las seculas de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica de la pasada campaña, que mermó la cabaña regional del bovino cárnico.

Cierto es que los precios de estos productos en la lonja salmantina prácticamente se vienen manteniendo en niveles altos desde la notable subida que experimentaron en el verano de 2021, tras haber permanecido planos o con subidas moderadas durante un sexenio, e incluso verse reducidos durante la pandemia del coronavirus, en el caso del añojo; o de arrastrar en el caso de las terneras descensos paulatinos durante años hasta la crisis sanitaria y la recuperación iniciada hace tres años.

Así se refleja también en estas dos gráficas de la ternera (arriba) y del añojo (abajo) del periodo 2015-2024 (mayo) que reproducimos a continuación, tomadas del Observatorio de Precios Agrarios y Ganaderos de la Junta de Castilla y León, referidas en ambos casos a las cotizaciones en la provincia de Palencia.

En el siguiente gráfico, también obtenido del Observatorio, sobre la evolución del precio del lechal en nuestra provincia en ese mismo periodo, se aprecia en el ovino de carne un comportamiento no muy distinto al del vacuno desde 2015 hasta la actualidad: tras un primer sexenio (2015-2020) de práctica estabilidad, e incluso de bajada en los años del coronavirus ante la merma de la demanda, desde 2021 se nota una recuperación del precio percibido por los ganaderos. En el caso del ovino, la gráfica muestra cómo se ve más afectado por la estacionalidad, con picos en torno a la Navidad de cada año, frente a unos precios del vacuno de carne mucho más constantes a lo largo del año, sin esa temporada alta con gran demanda en torno a las fiestas navideñas.