La CHD ha informado de que ha invertido 2,3 millones de euros para conservar y mantener los cauces de la provincia de Palencia. Este presupuesto no es anual sino que se ha ejecutado durante dos años. En este tiempo se ha actuado en varios tramos de los ríos Carrión, Camesa, Valdavia, Ritobas, Sequillo, Rubagón, Burejo, Pisuerga, Franco, Cardaño, Rivera, Lores, Lucio, Tarabás, Ucieza, Castillería, Boedo, Pequeño y Cueza y en una veintena de arroyos, llegando a 112 kilómetros en los que se han realizado fundamentalmente retirada de tapones, entresacas y podas, al tiempo que se han mejorado diversas estaciones del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH).

Esta inversión es absolutamente insuficiente para las necesidades de los ríos palentinos, los cuales están en su mayor parte abandonados y llenos de maleza esperando inundar las parcelas adyacentes un invierno detrás de otro. Además, aquellos agricultores que voluntariamente están dispuestos a realizar las actuaciones necesarias de limpieza por su cuenta se encuentran con que, en lugar de percibir un ingreso por su ayuda en la mejora de los cauces, deben pagar unas tasas del todo injustas cobradas por alguien que no está realizando su labor.