La isla de Svalbard se encuentra en el océano Ártico, aproximadamente a medio camino entre el Polo Norte y las costas de Noruega, y en ella se inauguró en el año 2008 el Banco Mundial de Semillas, gestionado conjuntamente por el Ministerio de Agricultura de Noruega y el Fondo Mundial para la Diversidad de Cultivos, perteneciente a la FAO, cuya utilidad reside en guardar muestras del mayor número posible de variedades vegetales de los diferentes países de modo que, si alguna se extinguiera, se pueda volver a multiplicar utilizando las semillas guardadas en este banco de semillas.
En España esta labor la desarrolla el Centro de Recursos Fitogenéticos, dependiente del INIA y el CSIC, el cual está ubicado en Madrid. Cuenta con un banco de germoplasma -nombre técnico de un banco de semillas- y coordina el trabajo de varios bancos de germoplasma que se encuentran diseminados por España principalmente en jardines botánicos y universidades. Llevar parte de nuestro patrimonio vegetal a Svalbard servirá para que, en caso de catástrofe, podamos contar con la seguridad de que nuestras semillas están replicadas en otro sitio.
A Noruega se han enviado 1.080 variedades de las que 114 son de trigo, 186 de otros cereales de invierno, 510 de leguminosas, 200 de hortícolas y 108 de maíz.