El embalse de Aguilar de Campoo ya almacena niveles de agua por encima del promedio que registró la última década a estas alturas de año. Sin duda, una buena noticia ante la próxima campaña de riego. El sistema Pisuerga, al que pertenece Aguilar, entra en abril con más del 61% de su capacidad total de embalse, mientras en el sistema Carrión se supera el 90%, según datos de la Confederación Hidrográfica del Duero.
El embalse de Aguilar de Campoo, vital para las posibilidades de riego en el Pisuerga (supone el 78 % de la capacidad de almacenamiento total de este sistema) lleva ya aproximadamente una semana por encima del promedio de esta época del año en la última década.
Las abundantes precipitaciones del invierno y del inicio de la primavera han contribuido a una sensible mejoría de las reservas en esta infraestructura hidrográfica, la de mayor capacidad de nuestra provincia.
Con 247 hectómetros cúbicos, Aguilar supone algo más de la mitad de la capacidad total de los cinco embalses que gestiona la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) en Palencia: 480 hectómetros cúbicos, si sumamos los dos embalses del sistema Carrión (Camporredondo y Compuerto) y los tres del sistema Pisuerga (Cervera-Ruesga, La Requejada y Aguilar).
Según los datos de la CHD, el embalse aguilarense ya superó el pasado lunes 25 de marzo el promedio de la década anterior en estas fechas (166 hectómetros cúbicos). Parece superada, pues, la situación de escasez relativa de almacenamiento que desde la primavera de 2021 se arrastraba en este embalse, y consecuentemente en el sistema Pisuerga.
SISTEMA CARRIÓN. Pese a que Compuerto presenta en la última semana salidas llamativas (34 metros cúbicos por segundo), el sistema Carrión aún sigue por encima del 90 % de su capacidad de embalse, gracias a unos aportes considerables por las últimas precipitaciones.
La CHD ha medido 870 litros por metro cuadrado en Camporredondo y 889 litros por metro cuadrado en Compuerto en el actual año hidrológico (es decir, desde el pasado 1 de octubre). Más modestas son las precipitaciones en la cabecera del Pisuerga, con 644 litros por metro cuadrado en Cervera-Ruesga, que bajan a 634 en La Requejada y descienden ya hasta los 383 litros en el embalse de Aguilar, mucho más ajeno al régimen pluviométrico de la Montaña.
En todo caso, estamos ante un año húmedo que explica esa recuperación del agua almacenada, que hace afrontar la campaña de riego con mucho más optimismo que las anteriores.
Esto no impide que ASAJA-Palencia siga creyendo en la necesidad de inversiones públicas que aumenten la capacidad de almacenamiento y regulación hidrológica en nuestra provincia.
Las notables salidas decididas para los embalses del Carrión, en previsión de nuevas aportaciones con las últimas lluvias y el deshielo, son el mejor argumento demostrativo de que seguimos tirando agua al mar que convendría conservar, no sólo para posibilitar un salto cualitativo en nuestra agricultura, sino también para asegurar todos los demás usos del agua en momentos de carestía, incluidos los propios caudales de mantenimiento o ecológicos.