La vendimia de 2024, tal y como se vaticinaba desde antes de comenzar, ha resultado menos generosa que la del pasado año y por debajo de una campaña normal. El descenso de producción se registra en las dos zonas de la provincia de Palencia incluidas en territorio con denominación de origen: si en la DO Cigales estiman una reducción de la producción de uva del 24 % con respecto a un año normal, en la DO Arlanza calculan que la bajada llegará hasta el 50 %.
La DO Cigales finalizó la vendimia a mediados de octubre, con una merma de cosecha de un 21 % con respecto al año anterior, según informa en su página web, donde explican que esta reducción «se preveía por las temperaturas tan altas y continuas, junto con el estrés sufrido por la viña en los dos años anteriores por la sequía».
«Este hecho ha sido relevante, pero la principal causa de menor cantidad de uva recogida ha sido el daño provocado por la plaga de conejos que está costando mitigar», añaden desde la DO Cigales. Asimismo, en algunos pagos se ha dejado sentir también el daño del topillo, que al trepar por las cepas puede haber incluso ocasionado deterioros en la planta que tardan en dar la cara..
MENOS UVA, PERO FRUTO SANO. En concreto, las bodegas de la DO han recepcionado 6,1 millones de kilos de uva frente a los 7,77 millones de uvas del año pasado, cifra que se sitúa más cercalm promedio de una campaña normal, que ronda los ocho millones de kilos. Es decir, la producción de uva en esta zona de las provincias de Valladolid y Palencia (sólo el término municipal de Dueñas pertenece a la DO Cigales), estaría en torno a una cuarta parte por debajo de un año normal.
La parte positiva de este año es el buen estado sanitario del fruto y los buenos parámetros recogidos por los enólogos para la elaboración de sus vinos. La directora técnica de la DO Cigales, Águeda del Val, comenta que la vendimia ha sido tranquila «dentro de la preocupación por el poco rendimiento de las parcelas, con un inicio pausado de entrada de uva que se generalizó la semana del 16 de septiembre». En la actualidad, la vendimia es más temprana tanto para la elaboración de rosados y blancos como para la de tintos, ya que se buscan graduaciones menores más acordes con las tendencias del mercado, con menos extracción y ligeros en boca.
METEOROLOGÍA EN CONTRA. Por lo que respecta a la DO Arlanza, que este pasado fin de semana celebró la Fiesta de la Vendimia por primera vez en la capital burgalesa, la merma con respecto a un año normal ha sido de un 50 % menos de uva, según el presidente de la denominación, Ramiro García. Se estima una cosecha total de medio millón de kilos de uva, frente al millón de una vendimia normal.
«Las cuatro olas de calor que vivimos entre julio y agosto, los pedriscos de la primavera y las heladas han tenido como consecuencia esta importante merma de kilos en relación con las que habitualmente se cogen». Ramiro Garcia apunta además que nos ha afectado a las dos zonas vinícolas de la denominación.
La DO Arlanza abarca un área en el sur de la provincia de Burgos y una parte menor en la de Palencia, en el valle medio y bajo de ese río y de sus afluentes hasta su confluencia con el Pisuerga. Es una zona enclavada entre la Sierra de Covarrubias, por el este, y los páramos del Cerrato, en el oeste.
FIESTA DE LA VENDIMIA. Su fiesta de la vendimia se venía celebrando de forma itinerante en alguna de las sesenta y siete localidades de su territorio (cincuenta y cuatro de Burgos, y trece en Palencia), donde se asientan sus dieciocho bodegas asociadas y sus veintidós productores.
Por primera vez, este 2024 se ha celebrado la fiesta en la ciudad de Burgos, con un fuerte respaldo por parte de las instituciones públicas burgalesas. Sin perjuicio de que el cartel (que reproducimos junto a estos párrafos) es de un diseño estético y elegante, no parece que la zona palentina de la DO Arlanza pueda verse esta vez muy representada con esa icónica imagen de la celebración. Dicho sea de paso, el diseño sí ha tenido, en cambio, el detalle de emplear unas gotas para el condado de Treviño —territorio burgalés y castellano, como bien sabemos—, un recurso que podría haberse usado igualmente para incluir a la zona palentina de la DO Arlanza./