Los tres ponentes –Alexander Krick, Salvador Garriga y Pedro Medina-, pesimistas respecto a la reforma del azúcar y la nueva PAC

Los 2.500 asistentes a la XVI edición de las jornadas “Palencia en el 2000” han supuesto un nuevo récord en la convocatoria que anualmente realiza ASAJA-PALENCIA en el mes de septiembre. El auditorio de Caja España que alberga las conferencias registró lleno en las tres citas (del miércoles 21 al viernes 23). Pero si durante las dos primeras jornadas no se encontraba un asiento libre, la asistencia en la de clausura fue masiva. Agricultores y ganaderos procedentes de todos los puntos de la provincia invadieron hasta los pasillos, permaneciendo de pie durante la conferencia y demostrando así que cuando se ofrece una buena información al sector, éste responde de manera positiva e intensa.

Y es que la convocatoria de este año reunía todos los condicionantes para esperar una importante respuesta. La reforma de la OCM del azúcar y la nueva PAC son motivos de incertidumbre en el campo palentino. Precisamente éstos se convirtieron en los asuntos protagonistas de las jornadas.

Unas jornadas que han puesto sobre el tapete el pesimismo generalizado que vive el sector por la situación crítica que atraviesa y ante la cual el presidente de ASAJA, Donaciano Dujo, ha pedido el apoyo de los hombres del campo a las movilizaciones previstas por la organización agraria en las próximas fechas, un calendario que se abrirá el día 15 de octubre en Salamanca coincidiendo con la celebración de la Cumbre Iberoamericana y continuará con una concentración diaria ante la sede del MAPA y una gran manifestación en Madrid para finales de año.

El futuro de la remolacha
El adjunto a la Dirección de la CIBE (Confederación Internacional de Remolacheros Europeos), el alemán Alexander Krick, fue el encargado de abrir las jornadas con la ponencia “El futuro de la remolacha en Palencia”. Krick apuntó los principales y radicales cambios que traerá la reforma del azúcar si en noviembre sale adelante: una bajada drástica del precio medio para la remolacha, que pasaría de 48,19 a 25,05 euros por tonelada en dos años, es decir, una reducción del 48 por ciento, que podría llegar al 55 por ciento a partir de 2007. El ponente llegó a asegurar que la reforma podría representar una pérdida de 6.500 euros por remolachero. En este sentido, Alexander Krick expuso la posición de la CIBE respecto a la reforma, que apuesta por una bajada del precio menos drástica y un aumento en el porcentaje de la compensación, además de defender que ésta vaya a parar al remolachero en su totalidad.

El responsable de la CIBE incidió en el peligro de la propuesta actual que “podría conducir a una situación donde la industria tendría todo el poder de decisión” y se refirió a un posible bloqueo en noviembre por parte de los países europeos que se han manifestado en contra de la reforma. Un bloqueo que, por otra parte, sería otro motivo más de incertidumbre para nuestros remolacheros, que no conocerán el precio de venta de la raíz en unos meses.

“Que Zapatero lidere la defensa del sector”
Ante el panorama pintado por el experto alemán, el presidente de ASAJA, Donaciano Dujo, solicitó que sea Zapatero quien encabece un frente común para evitar que los países del centro de Europa, fundamentalmente Alemania y Francia, se queden con el cupo y fijen el precio que ellos quieran.

“La defensa del sector de la remolacha debe ser una cuestión de Estado”, aseguró Dujo, que criticó una reforma “que sólo perjudica a los agricultores de un sector con el mayor rendimiento y pureza por hectárea en la región. En Palencia se producen 15.000 kilos por hectárea, más que en ningún otro sitio de Europa”. Por ello, el presidente de ASAJA pidió que “Zapatero haga de esto una cuestión de Estado. Para defender la remolacha no vemos otro camino que la presión a quien nos dirige, en este caso, Zapatero y la ministra”, argumentó.

Usar toda la artillería
En este mismo sentido se pronunció el consejero de Agricultura y Ganadería de la Junta, José Valín, que asistió como invitado a las jornadas de ASAJA y se convirtió en improvisado ponente. Recién llegado de Bruselas para asistir a las negociaciones de la reforma de la OCM del azúcar, Valín habló de una “situación preocupante”, aunque se mostró esperanzado “ya que las conversaciones aún están empezando, y existe cada vez un mayor número de países contrarios a la propuesta de la Comisión”. Por eso exigió un posicionamiento claro del presidente del Gobierno español, e incluso un pacto con los países fuertes para lograr objetivos”.

El consejero aprovechó su presencia en las jornadas de ASAJA para denunciar que el Gobierno de la nación le “está utilizando para responsabilizarme de una mala negociación en este asunto. No me han dejado entrar en las reuniones bilaterales y soy acusado por haber desenmascarado la coartada”, reveló.

“Se puede avanzar en el tema de la remolacha si en vez de hacer política barata, se hace un esfuerzo por profundizar en la negociación. Las cosas están mal, pero podrían tener solución si la presencia negociadora de Zapatero con toda la artillería que puede ser capaz de llevar en esta materia, de verdad se hace patente”, sentenció el consejero.

Perspectivas
La cofinanciación de las ayudas a la agricultura desde la Unión Europea, la pérdida de la consideración de Objetivo 1 y la entrada en Europa de los países del Este con los que repartir el mismo presupuesto son los tres condicionantes que, según avanzó Salvador Garriga Polledo, convierten en “graves” las perspectivas presupuestarias para el campo. Precisamente éste es el título de la segunda conferencia de las jornadas “Palencia en el 2000” –“Perspectivas presupuestarias para el campo europeo. Repercusiones en la agricultura y la ganadería palentinas”- que corrió a cargo del diputado por el PP en el Parlamento Europeo.

Aunque el eurodiputado no quiso que su intervención adquiriera un tono pesimista, sí reconoció que la situación el campo es más problemática ante esta situación. Garriga atribuyó la responsabilidad de esta situación al Gobierno de la nación. “Nosotros no estamos dispuestos a aceptar unas perspectivas financieras basadas en la cofinanciación de la agricultura, en el recorte indiscriminado de los fondos estructurales y en la pérdida absoluta de posiciones negociadoras para el Gobierno español y los intereses de los españoles”, aseguró el ponente.

Política barata
El director general de Política Agraria Comunitaria de la Junta, Pedro Medina Rebollo, se encargó de cerrar con su intervención –“El nuevo régimen de ayudas de la PAC a los agricultores y ganaderos a partir de 2006. Oportunidades del desacoplamiento”- las XVI jornadas de ASAJA.

Pedro Medina criticó la última reforma de la PAC –“si la anterior fue mala, ésta es peor”-, la calificó de “política barata” y explicó que se ha agravado con las decisiones adoptadas por el Gobierno y su forma de aplicarla, en cuestiones como el Artículo 69. El palentino de Cevico de la Torre lamentó que el nuevo sistema de ayudas ha significado un incremento de la burocracia para los agricultores y ganaderos, y aseguró que lo que de verdad es importante para los profesionales del sector son los precios que se pagan, no las ayudas que reciben.

Apoyo a las movilizaciones
La clausura de las jornadas corrió a cargo del presidente de ASAJA, Donaciano Dujo, que aconsejó a los agricultores “seguir produciendo, no abandonar, aunque ahora nos paguen por no producir, porque luego no sabemos qué va a pasar”. Dujo consideró que la cantidad que llega a Palencia en forma de pagos compensatorios “no es suficiente para compensar la pérdida de precio por la venta de nuestros productos y el incremento el precio de los medios de producción”, y coincidió con Pedro Medina al reconocer que “la reforma de la PAC es mala, por eso ASAJA ha estado en contra siempre, frente a las otras organizaciones como Upa y Coag, que dieron su beneplácito al Gobierno para aplicarla”, criticó.

Por último, el presidente de ASAJA señaló que el campo “vive un momento crítico. Nunca habíamos atravesado una situación de tanta incertidumbre ni las jornadas nos habían traído un mensaje más pesimista”, por lo que pidió apoyo para las movilizaciones que se desarrollarán en las próximas fechas en protesta por la falta de soluciones a todos estos problemas.