Los ganaderos han pedido este lunes, 25 de noviembre, en la Lonja Agropecuaria de Salamanca que la tablilla del bovino de carne incorpore subidas «contundentes» en todas las categorías, a fin de que las cotizaciones reflejen la realidad de los precios de mercado. El debate en la mesa se saldó con un nuevo retoque ascendente en las canales de añojos y terneras —esta semana, de cinco céntimos por kilo—, que no satisfizo a los productores. Tampoco a los compradores, que habían pedido una subida aún más contenida (tres céntimos) con el argumento de que la venta en los puntos nacionales ya se está resintiendo.
Sea por el incremento de la demanda (muy fuerte, según los propios ganaderos), dinamizado por las exportaciones a Marruecos y Argelia, sea por la escasez de oferta, los productores sostienen que los precios visados a día de hoy en la Lonja de Salamanca no se corresponden con la realidad, pese a los paulatinos aumentos que ha vivido la mesa de bovino de carne desde mediados de verano y, de manera más acusada, en los últimos dos meses.
En todo caso, el sector ganadero de bovino de carne respira aliviado tras unos años de mucha dificultad, ya que se enviaron muchos animales al matadero ante la carestía de la alimentación que originó la sequía y la inflación tras la guerra de Ucrania, una merma de la cabaña a la que se han sumado tambien las enfermedades del vacuno en diversos territorios de España.
OVINO. Por su parte, la Mesa del Lechazo de Castilla y León, referencia para los ganaderos de ovino de carne de nuestra provincia, mantuvo los precios en las cuatro categorías valoradas: lechazo IGP de Castilla y León, lechazo Tierra de Sabor, lechazo de diez a doce kilos para sacrificio y del lechal de doce a dieciséis kilos para cebar.
En la reunión quincenal celebrada este viernes, 22 de noviembre, en Tordesillas (Valladolid), se repitieron, pues, las cotizaciones que se vienen constatando desde vísperas de los sanantolines, la última semana de agosto. Se sitúan en unos 35-40 céntimos más por kilogramo que hace un año en los animales para sacrificio, con subidas porcentuales de algo más del 6 %, e incluso del 7,3 % en el caso del lechazo IGP; mientras la subida interanual de las cabezas de lechal para cebadero ronda el 6,3%.
Si se repite el comportamiento de años anteriores, aun con la importación de producto de menor calidad, aún cabe esperar nuevas subidas de no menos de un cuarto de euro en la próxima sesión quincenal, ya en plena campaña de aprovisionamiento y ventas cara a las fiestas navideñas./