Las bases provisionales de la concentración parcelaria Osornillo II se han publicado el pasado 4 de junio, por lo que se encuentran actualmente en plazo para presentar alegaciones hasta este próximo jueves, 4 de julio. La zona de concentración parcelaria afecta a una superficie cercana a los 1.808 hectáreas de las que 1.485 corresponden a las 694 parcelas para concentrar. Estas parcelas están aportadas por 192 propietarios y se distribuyen en casi 210 hectáreas de regadío y cerca de 1.276 de secano.

La superficie media por propietario antes de la concentración de este proyecto Osornillo II ronda las 7,74 hectáreas, con una superficie media por parcela de 2,14 hectáreas y un promedio de 3,6 parcelas por propietario. En Osornillo ya se efectuó un proceso de concentración parcelaria que concluyó en 1970, para una superficie cercana a las mil quinientas hectáreas de 352 propietarios.

A finales de 1999 se declararon de interés general las obras de consolidación y mejora de los regadíos de la Comunidad de Regantes del Canal de Pisuerga, con terrenos en la provincia de Palencia, pero también en la de Burgos; obras de las que se han ejecutado ya los sectores A, B, C, D, E y F, con una superficie total modernizada de algo más de siete mil hectáreas en los municipios de Astudillo, Villalaco y Villodre (sectores A y B, año 2005), Itero de la Vega, Melgar de Yuso, Herrera de Pisuerga, Ventosa, Zarzosa, Melgar de Fernamental y San Llorente (sectores C, D y E, año 2006) y Támara de Campos y parte de Piña de Campos, Frómista, Amusco y una pequeña parte de Santoyo (sector F, año 2015). Quedan pendientes 3.440 hectáreas de modernizar, que incluyen las de Osornillo II.

La citada comunidad de regantes aprobó en diciembre de 2017 impulsar la modernización de la parte correspondiente a Osornillo II. Paralelamente, en diciembre de 2018 fue aprobado por el Ayuntamiento de Osornillo solicitar la reconcentración parcelaria correspondiente a su término municipal, declarada de utilidad pública y urgente ejecución en octubre de 2020. Dos años más tarde empezó la investigación de la propiedad, trabajos que se han prolongado hasta la elaboración de estas bases provisionales ahora en trámite de alegaciones.

Las bases son el conjunto de documentos que reconocen el valor de las superficies aportadas por cada propietario, según su calidad agronómica y las parcelas en el terreno. Se obtiene un listado de los propietarios y sus parcelas diferenciadas según su clase, así como unos coeficientes de clasificación que valoran qué aporta cada propietario a la concentración parcelaria.

Según el estudio técnico previo de la zona de concentración parcelaria Osornillo II, fechado en abril de 2019, su presupuesto de ejecución por contrata se aproxima a los 1,42 millones de euros./