La provincia tiene el 78 % de los daños pero sólo se permitirán inicialmente quemas de cunetas y linderas en 24 municipios frente a los 34 de Zamora y los 55 de Valladolid, con el 5,7 y el 15 % dañado, respectivamente
Las medidas de control que consistirán en la quema de cunetas, lindes y regatos, como mecanismo de limpieza de la cubierta vegetal frente a la plaga de topillos, se van a autorizar en 24 municipios de Palencia, la provincia con mayor superficie afectada, el 78 por ciento, mientras que en Valladolid, con el 15 por ciento de los daños se permitirán las quemas en 55 municipios. En el caso de Zamora, un total de 34 pueblos podrá solicitar esta medida, cuando la superficie dañada es del 5,7 por ciento.
Son datos que ponen de manifiesto el agravio comparativo tras conocer las autorizaciones para control de la plaga de topillos. ASAJA PALENCIA no entiende cuál es el motivo que lleva a la Junta a restringir a 24 los municipios con autorización –tal y como se dio a conocer en la reunión de la semana pasada- cuando nuestra provincia es la que padece la mayor parte de los daños.
ASAJA considera que la Junta de Castilla y León sigue de espaldas al grave problema que padece el campo, y lamenta el grado de desconocimiento del Itacyl en nuestra provincia, como lo demuestra el hecho de haber anunciado esos escasos permisos.
La organización agraria denuncia que las medidas anunciadas en Palencia no guardan proporción con el daño recibido, y es más, las califica de “inversamente proporcionales” en comparación con el resto de provincias.
Además ASAJA duda de la eficacia de estas medidas, al considerarlas insuficientes por no haberse generalizado las quemas también a los rastrojos, ni haberse cambiado el protocolo en el uso de rodenticida para combatir los topillos, lo que califica como “una tomadura de pelo”.
ASAJA asegura que la situación provocada por la plaga a día de hoy es mucho más grave que la que teníamos hace un año, y que al contrario de lo que cabría esperar, la respuesta de la administración es mucho menos contundente.
Además la organización no se explica por qué aún no se ha dado a conocer la lista de municipios que podrán llevar a cabo las quemas de cunetas y regatos, mientras que en el resto de provincias se ha dado cuenta detallada de los mismos, dejando abierta incluso la posibilidad de ser ampliada para aquellos pueblos que así lo soliciten.
ASAJA PALENCIA lamenta que la Junta no reconozca la realidad de la plaga de topillos en la provincia, que han causado daños en 115.000 hectáreas por valor de 9 millones de euros, según el informe elaborado por los Servicios Técnicos de la organización, que toma como referencia los seguros agrarios, las tasaciones en cultivos y las declaraciones de siniestro de los afectados.
De este informe se deduce que más del 85 por ciento de los daños no van a ser indemnizados, bien porque no se han asegurado (sólo el 44 por ciento de cultivos herbáceos está amparado por seguros agrarios con cobertura para los daños de fauna, y el 5 por ciento en forrajes) o porque están dentro de la franquicia del seguro, que es del 20 por ciento. A ello hay que añadir la existencia de cultivos que tradicionalmente no se aseguran por desconocimiento del agricultor en el caso de nuevas líneas de aseguramiento o porque no son atractivas para su contratación, como es el caso de los forrajes, la semilla de alfalfa o los cultivos hortícolas, entre otros.
Por último, ASAJA anima a los técnicos del Itacyl a aceptar la invitación de los agricultores de la provincia para comprobar de primera mano los daños de los topillos, en la seguridad de que cambiarán radicalmente su percepción de la plaga, y por tanto, sus indicaciones para actuar al respecto.
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