Hasta este año la alfalfa se aseguraba en la Línea 315 de Agroseguro de cultivos forrajeros. Las principales coberturas eran las de pedrisco e incendio, y una que está teniendo mucho éxito en la provincia, la de daños por la lluvia una vez segada. Pero el sector estaba demandando un seguro que cubriera además de los riesgos de pedrisco y riesgos excepcionales, a otras adversidades climáticas como la sequía, al modo de las coberturas que hay en cereales.
Esta nueva cobertura se ha puesta ya en marcha para este año en varias comarcas agrícolas de Castilla y León, entre otras Sahagún y Esla Campos en la provincia leonesa. Se trata de un seguro de rendimientos que vienen fijados para estas dos comarcas en 4.000 kilos de alfalfa seca, repartidos 2.600 para el primer corte y 1.400 para el segundo corte. Igual que en los cereales, se cobra cuando las producciones peritadas sean inferiores al 70% de esos 2.600 kilos en el primer corte, es decir, inferiores a 1.820 kilos, o inferiores al 70% de los 1.400 del segundo corte, es decir, 980 kilos. Se ha de tener en cuenta que el daño de heladas no está amparado hasta el segundo corte. Las coberturas para este riesgo de sequía son únicamente para el periodo entre el 2º y el 8º año de implantación del cultivo.
También se puede hacer el seguro para la producción de semilla en segundo o sucesivos cortes, pero en este caso no están amparados los daños de sequia.
Los precios unitarios aplicables a este seguro, a efectos del pago de la prima y el cobro de las indemnizaciones oscilan en una horquilla que elige libremente el agricultor. En el caso de la alfalfa, oscila entre 112 euros toneladas y 140 euros tonelada.
Este seguro, como el resto, está subvencionado por el Estado a través de Enesa, y tiene la subvención máxima de la Junta de Castilla y León del 20%.
En las oficinas de ASAJA se te dará más información y se te calcularán los costes para el caso concreto de tú explotación. Consulta cuanto antes sin compromiso. El plazo finaliza el 20 de diciembre.
León, noviembre de 2020.
