No dudo de la capacidad técnica de quienes forman parte del Comité Científico de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, como tampoco dudo de que tienen tanta capacidad y más otros entendidos en materia de nutrición humana que no están entre ese selecto grupo de expertos. Pero dudo de la imparcialidad de la Agencia, de sus dictámenes y sus recomendaciones, y dudo porque al frente de ella está un comunista, el ministro Alberto Garzón, experto en adoctrinamiento, que utiliza todos sus medios, que en estos momentos son muchos, para imponer sus dogmas. El pasado lunes el ministro Garzón ha presentado el informe de la Agencia sobre las “recomendaciones dietéticas sostenibles y recomendaciones de actividad física para la población española”. Con este título tan rimbombante, debería de comenzar por aclarar qué se entiende por sostenible, porque en la definición de este concepto es en el primero que ya podemos empezar a discrepar una buena parte de la población española con el señor ministro. Por lo demás, podemos estar de acuerdo, porque es una obviedad, que un patrón de dieta variada y equilibrada, con mayor predominio de alimentos de origen vegetal, en detrimento de los de origen animal, puede mejorar el estado de salud y bienestar. Discrepo por el contrario en que esto tenga mucho que ver con la reducción del impacto ambiental, pues esta coletilla que añaden los expertos de la Agencia está fabricada para sostener las teorías “garzonianas”. En el poco espacio que me queda en esta columna me voy a centrar en la recomendación de consumir pescado, pero de “menor impacto ambiental”. Se refieren los colaboradores de Garzón al pescado de piscifactoría, al de pienso compuesto, al que se cría en “granjas de pescado” consumiendo un alimento muy poco distinto al que consumen nuestros cerdos o nuestros pollos, y donde se cuestionan o se pueden cuestionar aspectos de bienestar animal como los que se nos cuestionan a los granjeros tradicionales. Sano y sostenible, esa es la recomendación, pero ¿qué es sano y qué es sostenible?. Garzón no es de fiar.
*Artículo de opinión de José Antonio Turrado publicado en La Nueva Crónica del viernes 23 de septiembre de 2022