Los líderes de la UE han alcanzado un acuerdo por el que se recorta en 33.601 millones de euros el presupuesto comunitario para los próximos seis años
Los líderes de la UE han alcanzado un acuerdo por el que se recorta en 33.601 millones de euros el presupuesto comunitario para los próximos seis años
ESPAÑA SALE BIEN LIBRADA DE LA NEGOCIACION COMUNITARIA, LA PAC NO TANTO
Madrid, 8 de febrero de 2013.- Tras una intensa y dura negociación, los jefes de Estado y Gobierno de la Unión Europea han acordado, por primera vez en la historia de la Unión, aprobar una reducción del presupuesto comunitario, que tendrá un techo de gasto de 960.000 millones de euros para los próximos siete años. España, en líneas generales, sale bien parada ya que consigue mantenerse en el grupo de países “receptores netos de fondos” y obtendrá un tercio del nuevo fondo de 6.000 millones que se pondrá en marcha para atajar el desempleo juvenil en la UE.
Si bien es cierto que en esta última fase de la negociación el presidente del Consejo Van Rompuy no ha propuesto nuevos recortes al presupuesto de la PAC, hay que recordar que en propuestas anteriores, incluso en la Propuesta inicial de la Comisión, ya se contemplaban reducciones superiores al 10% y esas son las propuestas de las que se partía hoy y que definitivamente han sido aprobadas.
La PAC era ya entonces el capitulo más castigado, por lo que la nueva propuesta acordada simplemente consolida este recorte. El presupuesto de la PAC, se verá reducido un 13,1 por ciento respecto al periodo actual, es decir en 33.601 millones de euros menos. Esta cantidad es más del doble de lo que se reduce la partida bautizada como “conectando Europa” (transporte, energía y telecomunicaciones) y que algunas fuentes apuntan como la más perjudicada, con una reducción de 11.000 millones.
Con esta reducción de más del 13 por ciento en el presupuesto, las nuevas medidas incluidas en la PAC como el reverdecimiento o greening no tienen ningún sentido ya que lo único que van a conseguir es comprometer aún más la rentabilidad de las explotaciones agrarias europeas y españolas.
Aun es pronto para dar una cifra exacta de las repercusiones que podría tener para España, ya que esto dependerá de muchos factores. Dependerá, en parte, de aspectos relacionados con la negociación presupuestaria que se ha celebrado esta semana, y que están aún pendientes de dilucidar, ya sea en negociaciones tripartitas Consejo, Parlamento y Comisión y que se deberán plasmar en un acuerdo sobre la Reforma de la PAC y en sus posteriores reglamentos de aplicación. Pero dependerá también, a nivel interno de España, ya que las propuestas hasta ahora barajadas dejan un margen de maniobra a los EE.MM. inedito hasta ahora, ya sea en materia de definición de beneficiarios, en superficies elegibles a los pagos directos, en el modelo de aproximación interna entre los distintos pagos regionalizados o en la propia transferencia de fondos entre pilares.
Consideramos que es vital que el Gobierno y el Ministerio de Agricultura hagan valer, en ambos casos, el carácter estratégico del sector agrario español, que sigue siendo el que mejor comportamiento está teniendo en estos momentos de graves dificultades económicas como las que atravesamos.