Con su silencio están siguiendo el juego del Ministerio y de los intereses industriales, en contra de un sector que reclama el desacoplamiento total
COAG Y UPA ESTÁN CONTRIBUYENDO A QUE SE APLIQUE LA PEOR OPCIÓN POSIBLE EN LA NUEVA PAC
Con su silencio están siguiendo el juego del Ministerio y de los intereses industriales, en contra de un sector que reclama el desacoplamiento total
La organización agraria ASAJA de Castilla y León ha manifestado su preocupación por la postura que están manteniendo Coag y Upa respecto a la aplicación de la reforma de la PAC que se aprobó hace un año en Bruselas. La semana pasada, en la que la titular del Ministerio de Agricultura, Elena Espinosa, recibió a las tres organizaciones agrarias de ámbito nacional, quedó patente lo que cada una de ellas opina respecto al modelo de desacoplamiento de las ayudas.
ASAJA transmitió a la ministra la urgencia con la que se debe abordar el complejo y difícil desarrollo normativo que queda aún pendiente y la necesidad de clarificar los mecanismos de transferencia de derechos, así como la de que éstos se asignen a los agricultores ya en el año 2004. ASAJA comunicó a Espinosa su posición inequívoca a favor del desacoplamiento total en todos los sectores agrícolas y ganaderos por ser más ventajoso para el agricultor profesional y permitir «producir para el mercado y no para cobrar ayudas», y expresó su preocupación respecto a la condicionalidad y la modulación.
Por el contrario, Coag pasó de puntillas en su reunión con la ministra sobre el transcendente tema de cómo se ha de aplicar la nueva PAC, sin aclarar su posición al respecto. Por su parte la Upa, tal y como recoge su comunicado de prensa, «explicó a Elena Espinosa que aún no han definido su postura, por lo que esperan las propuestas que se hagan desde el ministerio para apoyar el desacoplamiento total o parcial».
ASAJA considera que la totalidad de los profesionales del sector en España y en Castilla y León son favorables al modelo de agricultura que diseñó en su día la Comisión, y que la opción de desacoplamiento parcial que sacó adelante el entonces ministro Arias Cañete atenta contra los principios mismos de la reforma, al no permitir diversificar las producciones para cultivar aquello que sea más rentable en lugar de lo que esté más subvencionado.
ASAJA de Castilla y León entiende que «la postura de Coag y Upa de guardar la cabeza debajo del ala y esperar a que el ministerio tome decisiones, sin apostar por una alternativa, encubre en realidad el apoyo al desacoplamiento parcial, pero están eludiendo pronunciarse explícitamente porque saben que todos los agricultores y ganaderos lo rechazan».
«Nuestra organización tampoco comprende la postura de las cooperativas agrarias, en el caso de Castilla y León de Urcacyl, que en vez de ponerse del lado de sus agricultores y ganaderos socios, que son los mismos que los de ASAJA y resto de OPAS, se suman a los postulados que respecto a la nueva PAC defienden los comerciantes de cereales, los fabricantes de piensos y harinas y la plataforma de fabricantes de medios de producción agrícola», añade la organización agraria.
Por último, ASAJA de Castilla y León afirma que se ha de aprovechar lo bueno que tiene la reforma, que es fundamentalmente la posibilidad que da de diversificar las producciones. En cuanto al riesgo de abandono de la producción en amplias zonas de territorio, ASAJA considera que se seguirán cultivando todas aquellas superficies que son rentables, y que se dejarán de cultivar aquellos terrenos marginales que no cubren los costes de producción y que su destino natural ha de ser medioambiental.
ASAJA LEÓN, 16 de junio de 2004.