La visita de los políticos a las instalaciones del matadero de la empresa Embutidos Rodríguez, destruido por las llamas, que se produjo ayer domingo, ha sido decepcionante para el sector ganadero.
NINGÚN POLÍTICO SE ACORDÓ DE LOS GANADEROS QUE SUMINISTRAN A EMBUTIDOS RODRÍGUEZ
La visita de los políticos a las instalaciones del matadero de la empresa Embutidos Rodríguez, destruido por las llamas, que se produjo ayer domingo, ha sido decepcionante para el sector ganadero. Nadie, ni tan siquiera la consejera del ramo ganadero, Milagros Marcos, tuvo unas palabras para el problema que se le presenta a las empresas integradoras de porcino, cooperativas y ganaderos que venden sus animales a esta cárnica, una de las más importantes de Castilla y León. La consejera de de Agricultura y Ganadería no considera que sea un problema para los vendedores de cerdos el encontrar, de la noche a la mañana, empresas que sacrifiquen y comercialicen 3.000 cerdos diarios que entraban en la cárnica de Soto de la Vega. Pero la realidad es otra muy distinta: se producirá una inevitable congestión del mercado al disminuir la oferta compradora, caerá el precio, se pasarán de peso los cerdos en la granja con la consiguiente merma de beneficios, se incrementarán los costes de la logística, y las pérdidas serán importantes tanto para las empresas integradoras como para los ganaderos integrados.
Nadie debió de darse cuenta que el matadero sacrifica cerdos, y que los cerdos salen de las granjas de León y de otras provincias próximas, y que en las granjas hay granjeros cuyas familias viven de criar y vender animales. No lo vio así la consejera de Agricultura y Ganadería, Milagros Marcos, ni el presidente de la Diputación, Juan Martínez Majo, ni el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez Quiñones. Porque del campo, al fin y a la postre, nadie se acuerda.
León, 23 de mayo de 2016.