Hay que poner en su justo término el debate sobre la prohibición de plantar choperas en los cauces de agua y en su zona de servidumbre, y lo digo porque algunos se están enterando ahora de una prohibición que surtió efecto con la publicación en el BOE del 22 de junio de 2013, del Real Decreto 478/2013 por el que se aprueba el Plan Hidrológico del Duero ahora vigente. Dicho Plan lo firmó el ministro Arias Cañete, y la revisión posterior, la ministra Isabel García Tejerina, el uno y la otra del gobierno de Mariano Rajoy. En dicho Plan, queda claro que no se pueden plantar chopos en las zonas de servidumbre de los ríos y cauces de agua, y que tan solo en determinadas condiciones, por supuesto muy restrictivas y subjetivas, se pueden plantar en las bandas de protección del cauce. Me voy a abstener de sacar los colores diciendo qué votaron en el Consejo del Agua de la Cuenca del Duero algunos de los que ahora se rasgan las vestiduras viendo cómo se aplica lo que ellos aprobaron, y viendo cómo ahora un gobierno socialista presenta el proyecto de nuevo Plan, y lejos de enmendar los errores, los corrige al alza. La realidad es que la Confederación Hidrográfica del Duero no para de cavilar para perjudicar a los usuarios del agua, y también en este caso a los usuarios del dominio público hidráulico, y lo hace gobierne quien gobierne, pues a sus presidentes o presidentas, le es más fácil ser condescendientes con un funcionariado soberbio que no admite opiniones, que con unos ciudadanos que legítimamente reclamamos nuestros intereses. Así las cosas, si de verdad en el arco parlamentario autonómico hay esa supuesta unanimidad para permitir la plantación de chopos en el dominio público hidráulico, de cara a la elaboración del nuevo Plan Hidrológico, que se lo vayan comunicando a sus respectivos partidos políticos en Madrid y que diputados y senadores tomen buena nota. Y que unos y otros tengan memoria de lo que dicen y de lo que votan, porque no faltará alguien que en espacios de opinión como este, se encargue de sacarle los colores, aunque los caraduras son inmunes a la crítica.
Artículo de opinión de José Antonio Turrado publicado en La Nueva Crónica del viernes 9 de octubre de 2021.