Se habla mucho sobre la necesidad de modernizar regadíos. Pero, ¿a quién corresponde financiar esta modernización? ASAJA aclara qué porcentaje asumen las instituciones, y cuál los particulares.
Fruto de los respectivos convenios entre el Ministerio de Agricultura y la empresa pública Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias, S.A. (Seiasa) por un lado; entre la Junta de Castilla y León y el Ministerio, y en tercer lugar los convenios suscritos entre las comunidades de regantes y Seiasa, la financiación de las obras de modernización de regadío responde al esquema que a continuación se describe.
Sobre el presupuesto total, la Junta de Castilla y León se hace cargo del 26%, encargándose en solitario de una parte de la obra que suponga dicho importe. Entre estas obras se encuentra el proceso de concentración parcelaria y las obras complementarias (caminos, desagües…), así como otras unidades de obra como pudiera ser balsas, tendidos eléctricos, estaciones de bombeo, etcétera. Una gran parte de estos fondos que aporta la Junta son fondos europeos.
Del 74% del resto de la inversión se elabora un proyecto, bien por parte de la comunidad de regantes o por parte de Seisa, y se financia de la siguiente manera:
- El 32,4% lo pagan los regantes solicitando un préstamo con la banca privada en las condiciones de intereses y plazos de devolución que negocien. El préstamo lo solicita la comunidad de regantes, con su garantía personal sin la garantía solidaria de los comuneros, y las cuotas se las cobra anualmente a cada comunero la propia comunidad de regantes, incluyendo devolución de capital e intereses. Por lo general este préstamo es a devolver en 25 años en cuotas iguales.
- 2. El 67,6% restante lo asume, en principio, la empresa pública Seiasa. De este porcentaje, 25,2 puntos porcentuales van con cargo a fondos europeos, al FEADER, que suponen para el agricultor una subvención a fondo perdido, mientras que los otros 42,40 puntos porcentuales los han de devolver los regantes en cuotas a lo largo de 25 años, entre el año 25 y el 50 de entregada la obra, sin que ello genere intereses, de los que se haría cargo el Estado a través de Seiasa.
En resumen, y sobre la totalidad del coste de la obra que se ejecuta entre Seiasa por un lado y la Junta de Castilla y León por otro, la financiación sería la siguiente:
- El 26% con cargo a la Junta de Castilla y León, como subvención a fondo perdido.
- El 18,65% será subvención FEAGA gestionada por Seiasa, es decir, el Estado. Subvención a fondo perdido.
- El 24% con cargo a la Comunidad de Regantes, que financiará con un préstamo a devolver en 25 años con sus correspondientes intereses, mediante cuotas anuales que girará a los regantes o propietarios de la tierra.
- El 31,35% que devolverán la Comunidad de Regantes entre el año 25 y el año 50, para lo cual girará las correspondientes cuotas a los regantes o comuneros. Los intereses que genera este capital van con cargo a Seiasa.
Por lo tanto, la subvención de la obra es de un 44,65%, más lo que pudieran representar los intereses de la devolución que se efectúa entre el año 25 y 50, y le corresponde pagar al agricultor o propietario, en 50 años, el 55,35% restante, más lo que pueda suponer los intereses del préstamo a 25 años que suscribe la comunidad de regantes.