La situación provocará subida de precios y caída en los rendimientos de los cultivos, en especial en los cereales
La organización agraria ASAJA de Castilla y León denuncia una insólita y nunca vista situación de desabastecimiento de abonos nitrogenados en todos los almacenes de suministro que operan en la Comunidad Autónoma. Esto ocurre cuando, después de los dos primeros meses del año de lluvias, los agricultores de Castilla y León, sobre todo los cerealistas, deberían de estar ocupados en incorporar este abono a las fincas, ya que agronómicamente es ahora el momento adecuado y todo lo que se retrase su aplicación va en detrimento del desarrollo de la planta. La situación hoy en Castilla y León es de desabastecimiento en la mayoría de los almacenes y cooperativas, lo que está provocando la desesperanza de los profesionales del campo, que ven cómo una vez más se especula para hacer subir los precios de los insumos, y lo que es peor, se pone en riesgo las expectativas de obtener una buena cosecha.
La responsable de esta situación, en opinión de ASAJA, no es otra que la empresa Fertiberia, del Grupo Villar Mir, una empresa que, casi en régimen de oligopolio, acapara el 75 por ciento del mercado de fertilizantes en España. Esta empresa, que en años anteriores almacenaba nitrato en sus 5 centros logísticos en el territorio español –uno en Pancorbo, en la provincia de Burgos, y otro en Villalar, en la de Valladolid– y en multitud de instalaciones de cooperativas y almacenistas distribuidores de la marca, este año no lo ha hecho, y por el contrario ha destinado su producción al mercado exterior desde distintos puertos francos próximos a sus 5 fábricas en España.
ASAJA hace un llamamiento a Fertiberia para que adopte medidas urgentes para paliar en parte el daño que con esta mala planificación puede causar al campo de Castilla y León, y le recuerda que ninguna estrategia empresarial debe de pasar por poner en riesgo las cosechas en el campo, y con ello la economía de decenas de miles de familias del medio rural. ASAJA estará vigilante para denunciar posibles incrementos de precios por la escasez de la oferta, y pide a la Junta de Castilla y León y al ministerio de Agricultura que tomen medidas al respecto.
El producto comercial más empleado es el denominado “nitrato amónico cálcico 27%”. El consumo de nitrógeno para la agricultura en Castilla y León es de 241.000 toneladas, equivalente a 892.000 toneladas del producto comercial con el 27% de contenido en N, y supone un desembolso para los agricultores de la región de más de 250 millones de euros.