Joaquín Antonio Pino, presidente provincial de Jóvenes Agricultores -ASAJA- de Ávila
Bien saben los ganaderos de la provincia lo que supone la palabra sanear. Saneamiento ganadero. Inmovilización de la explotación. Sacrificio de reses. No en vano, es uno de los principales problemas que afronta a diario el sector y por eso, como organización profesional agraria apegada a la realidad que somos, es uno de nuestros principales retos.
A solicitud de ASAJA de Ávila, la Junta de Castilla y León ha puesto en marcha en nuestra provincia el Grupo de trabajo para el seguimiento de la sanidad animal, para encontrar soluciones a los graves problemas de saneamiento que sufren nuestros ganaderos, en particular en zonas de alta montaña. Es el primer paso para que ASAJA, como interlocutor válido, continúe trasladando de primera mano la visión del sector. Pero no cantemos victoria. Este grupo de trabajo tiene que ser ágil y eficaz. En caso contrario, estaremos perdiendo el tiempo. Nosotros lucharemos para que se convierta en una herramienta útil, que aporte soluciones que mejoren la calidad de vida de los ganaderos.
Vamos a dar un margen de confianza. El 24 de abril se celebra la primera reunión, en la que nuestros ganaderos volverán a trasladar que la aplicación de las políticas de saneamiento ha supuesto el cierre de muchas explotaciones, y en los casos menos graves la inmovilización de la explotación o la imposibilidad de trashumar. Plantearemos las soluciones que lleváis tiempo trasladándonos, como la exigencia de contar con una sanidad más real y adaptada a las circunstancias particulares de las explotaciones. Más concretamente, medidas para evitar los falsos positivos, diferenciar los animales para vida de los destinados a cebadero o permitir el movimiento de explotaciones positivas a cebaderos no calificados, ya que no tiene ninguna repercusión sanitaria, así como prolongar la circunstancia excepcional para que el ganadero pueda cobrar los derechos asignados sin tener los animales, en explotaciones positivas o las que recientemente hayan recuperado la calificación. La clave pasa por flexibilizar la normativa existente y empieza por tener voluntad política para hacerlo. Trabajamos para encontrar soluciones. Y en esas estamos.
* Joaquín Antonio Pino es presidente de ASAJA de Ávila
Asociación Agraria – Jóvenes Agricultores