ASAJA de Castilla y León se congratula del apoyo parlamentario unánime a la modificación de la Ley de Concentración Parcelaria que presentó el pasado 24 de marzo en las Cortes el Grupo Socialista. La OPA vislumbra un cambio importante en la política de regadíos con la modificación de la Ley de Concentración Parcelaria como primer paso.
Con todos los votos del hemiciclo a favor, se aprobó dar trámite a la proposición, que incluye mejoras sustanciales para los agricultores, como que las obras complementarias (mayoritariamente, destinadas a la mejora del regadío) que se realicen en las zonas de concentración parcelaria sean pagadas por los interesados en el plazo máximo de 40 años (en lugar de los 20 de la amortización actual), con un interés máximo del 2 por ciento anual (ahora es el 4) y en pagos anuales de igual cuantía.
También se propone que las obras realizadas a solicitud de los agricultores, directamente o través de sociedades agrarias de transformación, cooperativas, comunidades de regantes u otras entidades asociativas, así como las solicitadas por los ayuntamientos, disfrutarán de una subvención del 50 por ciento de su coste cuando se realicen en zonas de concentración parcelaria.
Para ASAJA de Castilla y León este es el primer paso hacia la modificación de la Política de Regadíos a nivel nacional, y espera que a corto plazo se debatan las modificaciones de la Ley de Aguas y de la Ley de Reforma y Desarrollo Agrario, para equiparar las mejoras en todas las obras de regadío que están realizándose o que lo hagan en un futuro. En este sentido han ido todas las reivindicaciones de esta Organización Agraria desde hace algo más de un año.
Desde la OPA se entiende, que estas modificaciones son tan importantes para nuestros regantes, que en boca de su presidente Donaciano Dujo, “se insta a las Administraciones Públicas para que no cobren y a los regantes a través de sus Comunidades, a que no paguen”, hasta que esté concluido el proceso actual de modificación de la política hidráulica en Castilla y León, y en España.