Estupefacción en el sector tras escuchar las primeras declaraciones de la nueva ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, en las que marca las prioridades que marcarán el trabajo de su equipo. Destaca entre ellas el anuncio sorprendente de que su departamento pondrá en marcha un “banco de tierra” .
Respecto al primero de los puntos, la reforma de la nueva Ley de Arrendamientos, nada que objetar por parte de ASAJA de Castilla y León, ya que es bien conocida su oposición a una normativa que perjudica al agricultor profesional. Sin embargo, en cuanto a la Seguridad Social, la Organización Profesional Agraria (OPA) considera que, tras los cambios efectuados el año pasado, lo que urge es aprobar una nueva definición del agricultor a efectos de la aplicación del régimen.
Pero la prioridad más sorprendente es la intención de Espinosa de crear un banco de tierras, una idea calificada por ASAJA como “trasnochada, vacía de contenido y demagógica, que nos remonta a los tiempos de la Segunda República”. Según la OPA, esta propuesta va en contra de la lógica del trabajo agrícola, ya que es evidente que la tierra no es un bien que, como es el caso de los derechos de producción, pueda “desplazarse” por el territorio, y un agricultor desarrolla su profesión en un lugar determinado; además, tampoco se aclara cómo podría adquirir el Estado esas tierras, “puesto expropiarlas, a lo Mendizábal, ya no se lleva”, subraya. “Esta peregrina propuesta no tiene ni pies ni cabeza y, sin embargo, puede calar, a fuerza de repetición en la opinión pública ajena a la agricultura y al medio rural, por lo que es obligación del sector desmontarla desde ya”, recalca ASAJA.
Si de verdad la nueva ministra quiere favorecer el acceso de los jóvenes a la agricultura y la ganadería, no tiene más que poner en práctica, pero con recursos y convicción, lo ya conocido: dar ayudas a la inversión, facilitar el acceso a las cuotas y derechos de producción, e incentivar las jubilaciones anticipadas.
Por último, ASAJA de Castilla y León quiere sugerir al nuevo equipo ministerial que apunte en su agenda de prioridades las que realmente preocupan al sector. La primera el modo de aplicar la Reforma de la PAC, sobre el que Espinosa no ha dicho nada aún; la segunda, la ejecución del Plan Hidrológico Nacional y el Plan Nacional de Regadíos; la tercera, las inminentes reformas de Organizaciones Comunes de Mercado como la del azúcar, etc.