Más de 35.000 personas han participado en las protestas convocadas por las organizaciones agrarias en catorce puntos de siete comunidades autónomas. En Castilla y León han salido a la calle cerca de 11.000 agricultores y ganaderos en las distintas provincias, y se han movilizado además más de 800 tractores.
El “rotundo éxito” de las convocatorias demuestra el hartazgo del campo. “Es un clamor que no puede ser ignorado”, aseguran los organizadores. “El campo ha demostrado con creces su firmeza y su fuerza”, aseguran. “Nuestra problemática y nuestras demandas han inundado los medios de comunicación, las redes sociales y la sociedad en general, es un clamor que debe ser atendido”, han sentenciado.
La situación límite de la agricultura y la ganadería en España se ha hecho sentir esta semana en la opinión pública. El éxito de las marchas, concentraciones, tractoradas y protestas demuestra con claridad, a juicio de los convocantes, la urgencia de tomar medidas, articular reformas y cambiar comportamientos en la cadena agroalimentaria.
Medidas y cambios largo tiempo esperados y reclamados por el sector. El objetivo de las movilizaciones, explican, es servir para “cambiar las cosas” y producir un cambio de tendencia. Para eso, las instituciones, los Gobiernos y la cadena en su conjunto deben “sentirse aludidos y actuar”, han señalado.
Las movilizaciones continuarán la próxima semana
Los agricultores y ganaderos al límite, como se autodenominan, aseguran que las protestas continuarán la semana próxima, y hasta que se observe un “verdadero cambio de actitud” por parte de los responsables políticos. Ya están anunciadas las manifestaciones de Santander, Toledo y Madrid (lunes 3, martes 4 y miércoles 5 de febrero, respectivamente). Así como las de Córdoba, Málaga y Granada, la siguiente semana.
UPA, ASAJA y COAG han remarcado su condena hacia actitudes violentas “totalmente minoritarias y en absoluto amparadas por sus organizaciones”. Las protestas continuarán con su carácter reivindicativo y pacífico. “Nuestro objetivo es cambiar las cosas y tener un futuro como agricultores y ganaderos, nada más, ni nada menos”, han concluido.