Con motivo de la celebración hoy lunes 17 de enero de la festividad de San Antón, santo protector de los animales y, en su quizás olvidado origen, patrono del ganado doméstico y los ganaderos, ASAJA quiere subrayar la importancia de un sector que aporta el cincuenta por ciento de la Producción Final Agraria regional, que requiere de muchos sacrificios por parte de los profesionales que se dedican a él, que soporta una gran parte de las inversiones que se hacen en el campo, que genera mano de obra asalariada, y que lucha cada día contra infinidad de trabas administrativas, además de contra la mayor campaña de desprestigio a su imagen y buen hacer, que los profesionales soportan como pueden.
Este sector, el ganadero, sufre quizás en mayor medida los efectos de la competitividad y la globalización, por lo que cada año muchas explotaciones que no están bien dimensionadas y gestionadas se cierran de forma definitiva, aunque es cierto que por ahora los censos se mantienen o incrementan a costa del crecimiento de las más eficientes. El sector ganadero, más que el agrario, ocupa todo el territorio de Castilla y León siendo casi el único en zonas más desfavorecidas o de montaña, y fija población al medio rural al ser una actividad que requiere la presencia física del ganadero los trescientos sesenta y cinco días del año. Por ello, “podemos afirmar que la ganadería construye y vertebra nuestro país, proporcionando alimentos de calidad, generando actividad económica, vertebrando el amplio y despoblado medio rural y sosteniendo la población de nuestros pueblos”, señala Donaciano Dujo, presidente de ASAJA Castilla y León.
ASAJA quiere recordar en este día la reivindicación del sector de recuperar unos precios por la leche de vaca, y también de oveja, que permitan cubrir los costes y un legítimo margen de beneficio. También, la organización agraria llama a una reflexión a quienes, desde las ciudades, y sin tener intereses directos en el campo, se oponen a la implantación de granjas, descalificándolas por su tamaño o por unas prácticas que, según ellos, perjudican al medio ambiente o al bienestar animal. En este sentido, ASAJA recuerda que todos los proyectos que se aprueban cumplen con una legislación vigente, que es de las más exigentes del mundo.
En una región como Castilla y León, dedicada mayoritariamente a una agricultura de cultivos herbáceos extensivos, ASAJA quiere poner en valor un sector ganadero al que va destinado casi el cien por cien de nuestros cereales y forrajes, también en regadío, transformándolos en productos de más valor, como son la carne y los lácteos, que por su calidad están abriéndose importantes mercados dentro y fuera de la Unión Europea.
ASAJA pide a las administraciones que se siga avanzando en la sanidad animal, que se apoye a los ganaderos que modernizan sus explotaciones, y que se controlen las poblaciones de lobos y otras especies salvajes, que tanto afectan a la ganadería extensiva. También, ASAJA pide a la industria agroalimentaria y a la gran distribución que remuneren a los ganaderos con precios justos, que establezcan compromisos a largo plazo, y que apuesten por la producción local en vez de por las importaciones.