ASAJA de Castilla y León ha pedido que la huelga iniciada hoy por los transportistas respete las peculiaridades de algunos sectores agroganaderos, permitiendo excepcionalmente servicios como la recogida diaria de leche o el suministro de piensos a las granjas ganaderas intensivas.
La organización agraria comprende las reivindicaciones de los transportistas, puesto que la carestía del gasóleo también se está cebando desde hace muchos meses en el sector agrario (e incluso de forma más acusada, ya que los agricultores no pueden repercutir en el precio de sus productos el incremento de los costes de producción). Sin embargo, ASAJA pide a las organizaciones convocantes del paro que sean flexibles con el campo.
Especialmente grave es la situación de los ganaderos de leche, ya que se trata de un producto perecedero y que las granjas no pueden almacenar, puesto que exige la recogida diaria. A título orientativo, en un solo día las explotaciones de vacuno lechero de Castilla y León producen 2,4 millones de litros de leche, cuyo valor es de unos 750.000 euros, que se perderían si la recogida no se realiza cada día en tiempo y forma.
Igualmente, hay que tener en cuenta las necesidades de las granjas de ganadería intensiva, ya que la alimentación de los animales proviene de forma exclusiva del suministro periódico de las empresas de piensos, y la capacidad de almacenamiento de la mayoría de las explotaciones es mínima.
ASAJA entiende que ni se puede permitir que los animales mueran por inanición, ni que se tiren cada día millones de litros de leche por la interrupción del transporte, “por lo que confiamos en que las organizaciones de transportistas sean flexibles con estos temas”. En última instancia, la OPA entiende que el delegado del Gobierno, Miguel Alejo, tiene que garantizar unos servicios mínimos suficientes y eficaces.