Los reyes magos de ASAJA envían su cargamento de carbón a Arias Cañete, en una protesta secundada por varios centenares de agricultores y ganaderos

Profesionales del campo de Castilla y León reclaman bajo la lluvia que se desbloquee el pago de ayudas del Plan de Desarrollo Rural.

Pese a la persistente lluvia, los Reyes Magos de ASAJA de Castilla y León han cumplido esta mañana con su cometido anual, entregar su cargamento de carbón a aquella institución o empresa que ha destacado a lo largo del último año por su “mal comportamiento” con el sector agrícola y ganadero de la Comunidad Autónoma. En esta ocasión, el elegido ha sido el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, por poner trabas que han impedido que los agricultores y ganaderos de la Comunidad Autónoma reciban las ayudas del Plan de Desarrollo Rural.

Varios cientos de agricultores y ganaderos procedentes de todas las provincias de la Comunidad Autónoma, puesto que el problema afecta de forma generalizada a los profesionales del sector, han acompañado a los Reyes Magos en el recorrido de la peculiar cabalgata, iniciada junto a la Feria de Muestras y concluida a las puertas de la Delegación del Gobierno. En el trayecto, mostraban pancartas con la imagen del ministro de Agricultura acompañado por el lema “El campo al garete con el moroso de Cañete”. Ya en la Delegación del Gobierno, Sus Majestades, acompañados por los responsables de ASAJA de Castilla y León, Donaciano Dujo y José Antonio Turrado, presidente y secretario respectivamente, han presentado en el Registro una bandeja con carbón y una carta (*) dirigida al ministro, Miguel Arias Cañete, en la que se explican las razones por las que se ha hecho acreedor de este mineral.

Según las estimaciones de ASAJA, la deuda total pendiente de abonar a los profesionales del campo de Castilla y León asciende a 157 millones de euros, sumando cantidades todavía pendientes del año 2012 y la totalidad de las ayudas de 2013. La suma con otras ayudas pedidas en estos dos ejercicios y que todavía no se han validado elevarían la cifra a 270 millones de euros.

Mientras que el ministerio no desbloquee su aportación a estas subvenciones –que supone un 25% de la ayuda, puesto que el otro 25% lo pone la Junta de Castilla y León y el 50% restante son fondos europeos–, la ayuda sigue sin ser pagada a los agricultores y ganaderos, a pesar de que en muchos casos está vinculada a inversiones que ya se han realizado y certificado. Entre las líneas afectadas se incluyen ayudas netamenteinversoras, como la modernización de explotaciones, a la incorporación de jóvenes, a la industria agroalimentaria o a las iniciativas de grupos de acción local. Además, el PDR se completa con líneas de marcado compromiso medioambiental, como los planes agroambientales, y también social, como la dirigida a áreas de montaña y zonas desfavorecidas.

Donaciano Dujo subraya que “no quitamos responsabilidad a ninguna de las administraciones implicadas, pero tanto la consejera de Agricultura como el propio presidente de la Junta se han comprometido con el sector a liberar los fondos que corresponden a Castilla y León para financiar estas ayudas, por lo que entendemos que es a Arias Cañete al que le toca mover ficha y abonar el dinero pendiente. Si el retraso sigue, España podría acabar perdiendo los fondos que la Unión Europea dedica a estas partidas”. Por ello, ASAJA seguirá muy de cerca la resolución de este conflicto, puesto que es vital que se resuelva sin más demoras.