Las pequeñas y medianas empresas con centro de trabajo en Castilla y León podrán solicitar desde mañana ayudas para financiar las inversiones que hayan realizado o tengan previsto ejecutar con el fin de garantizar la máxima seguridad y protección de la salud de sus trabajadores frente a los riesgos derivados de la pandemia por COVID-19.
Con estos incentivos, convocados por la Consejería de Empleo e Industria, las empresas podrán financiar en primer término la adquisición de Equipos de Protección Individual (EPIs) frente a riesgos biológicos, apartado en el que se incluyen mascarillas, guantes, gafas, pantallas faciales y ropa de protección, siempre que este material cumpla con las disposiciones mínimas de seguridad y salud laboral dictadas en la normativa referenciada en la convocatoria que hoy publica el Boletín Oficial de Castilla y León.
En segundo lugar, los beneficiarios de las ayudas podrán cubrir gastos derivados de la asistencia externa a la que hayan tenido que recurrir para realizar labores de desinfección de los equipos, instalaciones y personas en respuesta a esta situación de contingencia.
Para finalizar, podrán sufragar costes asociados a la contratación de un servicio de prevención ajeno para la evaluación de los puestos de trabajo que puedan constituir población de riesgo frente al COVID-19.
Las inversiones financiables deben ejecutarse en el periodo comprendido entre el 10 de marzo y el 30 de septiembre de este año y, entre los requisitos exigidos a los beneficiarios se encuentra el de no haber sido sancionados con carácter firme por infracciones graves o muy graves en materia de prevención de riesgos laborales en los dos años anteriores.
El importe individual de la subvención será del 80 % del gasto aprobado, con un máximo de 2.000 euros por empresa. Las solicitudes deben cursarse a través de la sede electrónica de la Junta.